LA BRÚJULA

lunes, 9 de enero de 2017 · 00:00
Cuenta regresiva


Yo creo que nadie tiene la bola de cristal para decirnos a ciencia cierta cómo nos irá con el presidente electo de los Estados Unidos, Donald Trump, que asumirá su cargo el próximo 20 de enero .
Ya la cuenta es regresiva y las incógnitas cada día más dilatadas. Todos los politólogos (o casi todos) fracasaron en sus diagnósticos, en sus pronósticos, a pesar de la supuesta gran experiencia que los avalaba.
Por otra parte, afloró el sentir de una gran parte del pueblo estadounidense que estaba latente, invernando y no se expresaba dejando con ello al descubierto mucho del lastre de la condición humana que puso a la vista de todos que todavía está presente en esa sociedad (que también tiene muchas cosas altamente positivas) sentimientos de xenofobia, de odio en algunos sectores de baja cultura y de un olvido de su esencia como país conformado en su gran mayoría por migrantes, incluyendo a su presidente electo.
Los discursos, las actitudes y sus constantes contradicciones han puesto en el escaparate a un hombre con problemas de personalidad a un megalómano que ha puesto patas arriba a la nación más poderosa de la tierra y cuyas acciones en todos los campos influyen y repercuten en el resto del mundo.
Dolorosamente cuando tuvo expresiones y descalificaciones verdaderamente groseras sobre los mexicanos la respuesta de nuestro gobierno fue tibia, vergonzosa, y cuando digo gobierno me refiero al Poder Ejecutivo y al Congreso.
El Ejecutivo acaba de nombrar a un nuevo secretario de Relaciones Exteriores cuyo discurso fue: "Vengo a aprender”, entre otras cosas. Me pregunto ¿A estas alturas sumamente delicadas es momento para aprender?, ¿Estamos tan jodidos en nuestro país que es el más cercano a los Estados Unidos y cuya vida diplomática ha estado ineludiblemente unida a los vecinos del norte en todos los contextos habidos y por haber carecemos de verdaderos talentos para que nos representen en lugar del señor Videgaray cuate del presidente?, ¿Así de mediocres somos?
Yo tengo la impresión (opinión modesta de un simple ciudadano mexicano) que una vez en el poder Trump se va a topar con el mundo real y no con el que ya desde ahorita nos está queriendo imponer. 
Un ejemplo: Si Estados Unidos quiere competir en el mercado internacional con China o Japón ¿Cómo va a bajar sus precios de producción si China baja sus precios de producción a través de una mano de obra sumamente barata? Pagándole menos a sus obreros…me parece una ficción- Yo creo que va a tocar muchos intereses de orden económico que le puede costar mucho.
Por otra parte tiene todo el perfil de un dictador que es la antítesis de una sociedad que sustenta su Estado de Derecho y su esencia misma en la democracia.
El proceso electoral de los Estados Unidos dejó en duda su eficacia. Sin ser un conocedor creo que deberán hacer una revisión a fondo para que en el proceso si se vea expresado el sufragio de todos y cada uno de los estadounidenses y no amañado para que sólo se vea reflejado el de los más preparados. Los derechos humanos no pueden ni deben a través de la manipulación hacer diferencias.
Eduquen cívicamente y por ese camino transiten para que sus procesos electorales sean equitativos.
Creo yo que si se hiciera un estudio psicológico respecto de la personalidad del Presidente electo nos llevaríamos algunas interesantes respuestas.
Por otro lado se sabe que está conformando su equipo de trabajo con personas de línea muy dura donde veo muy difícil que el dialogo y la apertura para escuchar se dé y más bien prevalezca la imposición de criterios.
Otra incógnita más es la de cómo va a actuar el Congreso que en su gran mayoría está integrado por Republicanos al igual que Trump y donde muchos (creo yo) no piensan como el elegido.
Ojalá y México asuma una postura digna y no la de un títere o de sumisión y entrega al grado que nos marquen rumbo y el ritmo en que nos debemos desenvolver.

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