“La objetividad en el vino”

“Un brindis por la cumpleañera” dijo alguien hace unos días, durante una comida que me organizó mi hermano Miguel por mi cumpleaños. Todos levantamos nuestras copas, pero me derretí de amor cuando vi a mi sobrina levantar su tacita y decirles “salud” a sus amiguitos. Presumir que nuestros hijos, sobrinos, ahijados, etc, son bonitos, los más bonitos o preciosos, es algo que seguramente todos hemos hecho. Y aunque en algunos casos sea cierto, en muchos otros es lógico que el corazón le gane a la imparcialidad y se pierda la objetividad.

Además, los gustos y estándares de belleza son diferentes por regiones, razas, culturas y en cada uno de nosotros, por lo que es casi imposible que haya decisiones unánimes.

Algo parecido nos pasa con el vino. Cuando el vino es de nuestra tierra, conocemos su historia, a quien lo elabora, es de algún familiar o aún más marcado, si nosotros mismos lo hicimos, podemos pensar que es el mejor vino del mundo, cuando en realidad no lo es. Si bien nuestro muy personal juicio y gusto es lo más importante al momento de elegir y disfrutar un vino, la opinión y calificación de alguien experto e imparcial ayuda mucho, sobre todo a los productores, a tener la certeza que se están haciendo bien las cosas. Ahí radica la relevancia de los resultados de los concursos internacionales. En los que en la mayoría de los casos, los jueces no tienen conocimiento previo ni lazos que los unan a alguna etiqueta en particular.

La semana pasada muchos vinos mexicanos fueron calificados en dos eventos diferentes. En la CDMX se llevó a cabo el V Salón Selección Guía Peñín, que es la guía más reconocida de vinos españoles y realiza salones en otras regiones vitivinícolas del mundo. Los jueces otorgan puntos a los vinos participantes en una escala que va desde 50 hasta 100 puntos, siendo 95 a 100 “Vino Excepcional”, 90 a 94 “Vino Excelente” y 85 a 89 “Vino Muy Bueno”, descendiendo hasta “Defectuoso” Con mucho gusto les platico que la mayoría de nuestros vinos fueron considerados Muy Buenos y Excelentes.

A 3,000 kilómetros de distancia se llevó a cabo la edición XXVI del Concurso Internacional “Ensenada Tierra del Vino 2018”, organizado por la UABC. Este año se otorgaron las 4 medallas Gran Oro a vinos mexicanos, y medallas de Oro y Plata a vinos de México, Estados Unidos, España y Brasil. Este concurso cada vez más reconocido, a partir del próximo año será avalado por la Organización Internacional de la Viña y el Vino, según palabras de su Vicepresidenta Claudia Inés Quini, y que fungió como juez internacional.

Para mí, que llevo algunos años impulsando la cultura del vino en México, es un orgullo constatar que tanto especialistas como concursos en todo el mundo están reconociendo los vinos de México por su excelente calidad.

Afortunadamente nunca he sido ni seré juez en concursos de belleza o de vinos. Por lo que sin pena de que me critiquen por ser totalmente parcial y con absoluta falta de objetividad, les aseguro que mi sobrina Rafaella es la más hermosa y les puedo decir que el vino mexicano es el mejor. ¡Del mundo!

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