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ANDANZAS ANTROPOLÓGIGAS: El Ex Cuartel de la Compañía Militar Fija de Ensenada.

jueves, 21 de mayo de 2015 · 00:00
Por: Arq. Jorge Víctor Toledo Rivera*
 
 
Al establecerse en lo que hoy es la ciudad de Ensenada, la Cabecera Político Administrativa del Partido Norte de la Baja California, en mayo de 1882, surge la necesidad de dotar a la plaza de un inmueble  para alojar el Juzgado de Primera Instancia, la Sub Prefectura Política del Partido Norte y a la tropa militar destinada al resguardo del puerto y de la línea fronteriza, provenientes de su anterior asentamiento en Real del Castillo. 
Así da inicio, según el Historiador Martínez Zepeda, la Construcción de una casa de adobe con cuatro piezas, techo sencillo de tejamanil y piso de madera, con una superficie de 25 metros de frente por 12 metros de fondo del solar C, de la manzana 14 ubicado en la entonces denominada calle Hidalgo que posteriormente se denominaría Gastélum, en un solar cuya dimensión  de fondo era de 50 metros, por lo que quedaron sin construir 38 metros de fondo por sus 25 de ancho. 
Según otros documentos consultados, durante el período 1884-1886, inició la edificación de la parte restante del lote, con nuevas instalaciones acondicionadas para el alojamiento de la Compañía Militar Fija, durante 1887 y 1888 se continuaron las complementaciones y mejoras y entre  1887 y 1888, le fueron añadidas al primer cuerpo y a la parte posterior del edificio, sus respectivos niveles superiores, así como los dos torreones, las líneas de aspilleras y el pretil almenado. Magaña Mancillas, en sus trabajos investigativos señala que en 1888 se desocuparon las oficinas del Juzgado, efectuándose mejoras a la edificación para la tropa de soldados. 
No obstante los escasos apuntes históricos referidos al surgimiento y evolución del edificio, tanto el primer cuerpo como la parte posterior fueron recibiendo adecuaciones y mejoras a lo largo de los últimos 15 años del Siglo XIX, conforme a las necesidades y en concordancia con las limitaciones de recursos para esos fines, ello se hace evidente al analizar las variaciones tanto en soluciones constructivas como en materiales. 
A partir de la segunda mitad del siglo XX, el Inmueble se destina, en la totalidad de sus espacios, para la actividad de Cárcel Pública y Comandancia de la Policía Municipal, función que conserva hasta finales del año 1986, en que al edificarse una nueva penitenciaría, es liberado de ese uso que resultó en extremo nocivo para el inmueble, ya que el mismo fue sometido a indiscriminadas mutilaciones, alteraciones y añadidos en sus espacios, elementos y partes constitutivas del programa arquitectónico que le dio origen y lo caracterizó como referente histórico arquitectónico del período que marcó el surgimiento de la ciudad de Ensenada y su significación en la defensa de la frontera noroeste de la nación.
Al concluir su función de Cárcel Pública, en ese propio año de 1986, la Delegación del INAH-BC, inicia los trámites para rescatar el edificio en su calidad de Bien del Patrimonio Cultural Inmueble y Monumento Histórico por Determinación de Ley, e instalar en el mismo el Museo Histórico Regional, inicia con tareas de limpieza y saneamiento de los espacios para el montaje de una exposición itinerante en el año de 1987, con el objeto salvaguardar el inmueble y marcar su destino como uso orientado a la promoción, difusión y enriquecimiento de la cultura. 
En la actualidad se cuenta con un proyecto integral de restauración que permitirá la dignificación de la totalidad de sus espacios, mediante el rescate de sus elementos y partes constitutivas que subyacen aún como referentes imborrables de una importante etapa de la historia de la ciudad de Ensenada. 

* El autor es responsable del área de Monumentos Históricos del CINAH-BC.

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