Salen al ruedo

- PAN vs PAN - Ser o no ser ante el juez - Reacomodos en el SEE
miércoles, 16 de julio de 2014 · 23:29
Esta semana es de sorpresas, pues dos gallos salieron a la luz pública después de mucho tiempo sin vérseles, uno de ellos es el ex alcalde Enrique Pelayo Torres, quien sigue pagando la factura por sus desatinos en el Palacio Municipal, esta vez  tuvo que comparecer ante el Ministerio Público para ratificar su declaración como indiciado en los delitos de negociaciones ilícitas y desvío de recursos, y eso es el comienzo, porque tendrá que acudir todas las veces que lo llamen a careo, comparecencia o ratificación; él junto con cinco ex funcionarios de su gabinete ya comparecieron.
El otro del que le hablamos es el líder municipal del PAN, Hugo Zepeda, quien salió al ruedo también para calificar con un seis al director de la Cespe, Arturo Alvarado, por su mal desempeño en la dependencia; la crítica de Zepeda es cosa rara, dado que no se caracteriza por señalar los yerros de los funcionarios enemigos, ¿será acaso por eso que un diputado local está creciendo en presencia ante la gente ante por el vacío de liderazgos?


Hirata en aprietos
En un buen aprieto está metido el alcalde Gilberto Hirata Chico, porque en sus ya siete meses se ha manejado o lo han manejado de bajo perfil, pero esta vez la justicia lo obliga a tomar al toro por los cuernos en el caso de La Bufadora, y es que el Tribunal Colegiado con sede en Mexicali resolvió que el Ayuntamiento de Ensenada deberá de desalojar a 147 familias de locatarios del centro turístico; ya el martes el secretario del Ayuntamiento, Jesús Jaime González Agúndez, dijo estar en desacuerdo en utilizar la fuerza pública contra los comerciantes, y ayer el presidente municipal sostuvo que no lo hará, o sea, que esto se puso color de hormiga, la medida la ordena la justicia, pero a todas luces es antipopular, lo cual es un problema para los políticos, vamos a ver como terminan esta turbulencia.

El dedo en…el bache
Ayer no fue un buen día para el alcalde, por si fuera poco el tema de La Bufadora, ayer los transportistas le dieron un zape, al cuestionárseles a su líder, Raúl Carrillo Espinoza, presidente de la Unión Estatal de Transportistas de Baja California, sobre el mal estado de las unidades y la intención de aumentar el costo del pasaje, a lo que justificaron que no han mejorado el transporte público debido a que la autoridad tampoco ha cumplido con reparar las calles de la ciudad, las cuales están llenas de baches.

A ver si es cierto
Después de tantas quejas, reclamos y dolores de cabeza, la Policía Federal de Caminos da la cara e inicia el operativo de verano, que viene cargado, eso dicen, de sendas multas por rebasar autos en zonas no permitidas (10 días de salario mínimo), mientras que por exceso de velocidad alcanzan hasta 40 salarios mínimos, según ellos vigilarán la zona y ya se verá si es verdad, porque la carretera libre está llena de caravanas de autos que vienen detrás de vehículos de carga pesada y son raras las veces que se detienen para que pasen los autos; lo anterior causa la molestia de los automovilistas; ojalá y sí se apliquen las medidas y vigilen que no se den las caravanas, porque con el inicio de las fiestas de la vendimia este problema puede traer serios problemas en el flujo de visitantes.

Abuso e injusticias 
El favor que la ex diputada local y ahora secretaria general del PAN, Lizbeth Mata Lozano, le hizo al ex gobernador, José Guadalupe Osuna Millán, para "aguantar” la definición de los límites territoriales entre Playas de Rosarito y Ensenada (cuando se abstuvo de votar un dictamen que hacía justicia a Ensenada), le está saliendo caro a trabajadores del Sistema Educativo Estatal, y no sólo porque uno de los premios para la joven panista fue colocar a su mamá, Adela Lozano, como delegada, sino porque ahora esta funcionaria está acomodando a sus amigos, compañeros de partido y familiares, para lo cual, obviamente, requiere de hacer despidos o renuncias obligadas.
Entre los "enroques” de la delegada está el del almacén, donde quiere poner nada más y nada menos que a Carlos Octavio Rubio, un ex funcionario con un historial que no puede presumir, pues lo removieron de su último cargo en Tijuana por faltista, porque se aventaba hasta nueve días de descanso "al hilo”, y con goce de sueldo.
Sólo el mes de junio de 2013, el mismo sistema educativo le levantó actas porque faltó los días 17, 18, 19, 20 y 21 de junio, y no pasaba el mes cuando el promotor educativo, volvió a ausentarse de la chamba los 8, 9, 10, 11, 12, 13, 14, 15 y 16 de julio, según costa en el oficio PS/070/2013.


¡También Lomelí!
Otro que se supone que, en breve se convertirá en subordinado de Adela Lozano, es nada más y nada menos que Ricardo Lomelí, quien despachará en Recursos Materiales, sin contar que la profe panista tiene en la mira, para sus familiares, áreas como educación especial, sin contar del desastre que ya armó en educación primaria.
No conforme con aprovechar el periodo vacacional para su "reacomodo”, también pretende incluir la inspección de educación superior, para mandarla (dizque por falta de espacio) al Indivi (no es broma).
¿Y de todo esto que tendrá que decir el Gober...? ¿O acaso las decisiones se toman con su aval?

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