La Bufadora

Cuando algún asentamiento humano o región productiva del país sufre los embates de fenómenos naturales, tras emitirse la declaratoria de zona de emergencia es posible que reciba recursos federales del llamado Fondo de Desastres Naturales (Fonden), pero Baja California, y concretamente Ensenada, difícilmente se les asignará una partida extraordinaria para reparar los daños ocasionados por el temporal que azota el noroeste de la república.

El hecho de que los baches se hayan multiplicado o que se desplomaran decenas de postes, árboles y anuncios espectaculares, no son estragos suficientes para merecer ayudas económicas por parte de la federación, pero tampoco las autoridades municipales o estatales disponen de un fondo de contingencias para esta clase de situaciones.

Así que los ensenadenses que circulan por las destrozadas vialidades de la ciudad tendrán que hacer acopio de toda su paciencia para no estallar en cólera cada vez que su vehículo caiga en un profundo hoyanco, porque no hay calle, avenida o bulevar que sea seguro; sin embargo, lo que estamos padeciendo los residentes del municipio más extenso territorialmente de la entidad, no son los efectos de las recientes lluvias, sino el producto de más de seis años de abandono, negligencia y corrupción de nuestros gobernantes; porque lo único que hizo el agua de lluvia y el viento fue hacerlo más evidente.

El problema es que se necesita una millonada para reparar las calles, y el actual Ayuntamiento no tiene dinero.

Como parte de las medidas de austeridad anunciadas por el Poder Judicial de la Federación (PJF), al Tribunal Electoral federal se le recortarán 485 millones de pesos de su presupuesto para este año.

Este monto representa una reducción aproximada del 15.51 por ciento de los 3 mil 125 millones 2800 mil de pesos que recibió para 2017.

Integrantes del Tribunal precisaron que, de acuerdo con lo establecido por la Dirección de Administración del PJF, el ahorro mínimo por parte del organismo será de 480 millones.

Entre las medidas de ahorro que tomará la institución, informaron, está la racionalización de los gastos de viáticos y pasajes.

También se limitará la adquisición de bienes muebles e inmuebles y se aplazarán los proyectos de obra pública que no resulten prioritarios.

Otra de las acciones de austeridad será devolver a las arcas públicas los recursos presupuestados que no hayan sido ejercidos.

Además, agregaron, aún se analiza a qué otros rubros se le podrían hacer recortes en el gasto.

En total, el PJF, que aglutina a la Suprema Corte de Justicia de la Nación, al Tribunal Electoral y al Consejo de la Judicatura Federal, acordó ahorrar un monto estimado de hasta mil 900 millones de pesos, los cuales serán reintegrados al erario.

No obstante, lo ideal sería eliminar los tribunales electorales estatales, sobre todo cuando en breve se empatarán los comicios locales y federales, porque es evidente la duplicidad de funciones, y durante los años no electorales la carga de trabajo de los magistrados es nula y se les paga mucho dinero.

En este 2017, la economía mexicana crecerá sólo 1.2 por ciento, la inflación llegará a 5.2 por ciento y el tipo de cambio cerrará en 22.78 pesos por dólar, pronostica Citibanamex.

"La perspectiva para la actividad local está siendo oscurecida por los potenciales planes de la Administración (de Donald) Trump con respecto a la relación bilateral entre ambos países.

"Los agentes económicos enfrentan mayor incertidumbre sobre si estas condiciones se mantendrán más adelante”, señala el grupo financiero en un comunicado.

Para 2018 el pronóstico establecido es un crecimiento de 2.2 por ciento.

"Esto refleja un ambiente más retador para el sector externo y la inversión, mientras que el mercado local también enfrentará varios obstáculos”, agrega.

Ante la debilidad del peso frente al dólar y el proceso de liberalización del precio de la gasolina, la inflación alcanzará un nivel que no se ha observado desde hace más de una década.

"Estimamos que la inflación general alcanzará 5.2 por ciento anual para el cierre de este año”, agrega.

Citibanamex anticipó además que la volatilidad del tipo de cambio se mantendrá durante el inicio de la administración de Trump y se observará un nivel de 22.5 pesos por dólar hasta la primera mitad del año.

"Para la segunda parte, esperamos que el peso modere el ritmo de depreciación aunque mantenga su tendencia negativa y cierre 2017 en 22.78 pesos por dólar”, concluyó Citibanamex.