LA BUFADORA

BUFADORA

Por El Mosquito
domingo, 24 de junio de 2018 · 00:00

Con la vida de un tuit, el politólogo español Fernando Vallespín, coautor del libro Populismos (Editorial Alianza), ejemplifica el caldo de cultivo de lo que él define como una forma de hacer política: “Mando un tuit emocional y me retuitean inmediatamente; cualquier racionalista o argumentativa pasa desapercibida. Estamos hipersensibles”.

El populismo se aprovecha de esa hipersensibilidad, afirma Vallespín, quien en el libro busca una definición del populismo y explicar las razones de su ascenso.

“Esta es la época de la rabia -dice en entrevista con el periódico Reforma- pero también es la era del miedo, es la era del resentimiento de aquellos que no pueden alcanzar los fines que se proponen, por tanto, hay mucha emoción negativa y lo que tratan de hacer los populistas es introducir un elemento de esperanza; se trata de captar la sensibilidad emocional de las personas”.

Catedrático de la Universidad Autónoma de Madrid, considera que el populismo aprovecha la rabia y el miedo o la frustración de los electores para vender una esperanza, aunque ficticia, debido a la cantidad de interdependencias a las que los gobiernos están sujetos.

“La gente piensa que el populismo es una ideología política, pero a mi juicio realmente de lo que se trata es de una forma de hacer política que consiste fundamentalmente en estrategias de comunicación, en la retórica que emplean, en la forma en la que enhebran el discurso político que, muy resumidamente, se caracterizaría por el hecho de dividir el espacio político en dos: ‘Nosotros’: ‘el pueblo’, ‘los buenos’, y ‘Ellos’: ‘las élites’, ‘los malos’, los corruptos, los que oprimen a ese pueblo”.

El líder populista se abroga el monopolio de hablar en nombre del “pueblo”. El escritor sostiene: Los populistas movilizan dividiendo, olvidan que eso que llaman “pueblo” es algo mucho más complejo, más plural y diverso.

El catedrático español, autor del libro El futuro de la política, afirma que populismo tiene diversos orígenes. Desde la apertura de las fronteras o la globalización económica hasta las promesas frustradas de la democracia.

“El problema de las democracias maduras es que cada vez son más tecnocráticas. El mundo hoy de la política oscila entre una tecnocracia, por un lado, y por otro lado el populismo. Entonces estamos entre esos dos extremos y los dos extremos son malos para la democracia”, alerta.

Vallespín encuentra en Donald Trump, presidente de Estados Unidos, al representante de un populismo de derecha que habla “el lenguaje del pueblo”, que se dirige a los trabajadores que han perdido o sienten amenazados sus empleos.

En el plano mexicano, afirma que Andrés Manuel López Obrador tiene el rasgo populista como la división que traza entre él, “el bueno”, “el único digno”, y el resto de los políticos. Pero no encuentra en él una intención de destruir los controles de la democracia liberal, como la independencia del Poder Judicial, como ha pasado en regímenes de Este de Europa y de América Latina.

Lupa en el sureste
La Fiscalía Especializada para la Atención de Delitos Electorales (Fepade) pondrá especial atención a los estados del sureste el día de la jornada electoral.

Héctor Díaz Santana, titular de la dependencia, reveló que el mayor despliegue ministerial estará en entidades como Veracruz, Chiapas y Tabasco.

“Tenemos el mayor número de despliegue en el Estado de México, Veracruz, Chiapas, de cierta manera Tabasco, los estados del sureste.

“Este trabajo es de manera, digamos colectiva, con fuerzas de seguridad y justicia”, señaló el Fiscal en conferencia de prensa.

Díaz Santana anunció que el 1 de julio el estado de fuerza de Fepade y la PGR para cuidar el voto y atender posibles delitos electorales, será de 14 mil 644 servidores públicos.

Explicó que de ese total, 8 mil 645 serán funcionarios de apoyo, guardia y operación; mil 749 peritos; 400 analistas de información; 3 mil 500 policías de investigación, y 128 ministerios públicos.

“En el año 2012 fueron casi 6 mil, ahora vamos a tener 14 mil 644, esto realmente no hubiera sido posible si no se tiene el apoyo de la PGR”, apuntó.

“Todos tenemos un fin común, que el primero de julio sea una fiesta democrática, sea un ejercicio ciudadano de civilidad, de respeto, de tolerancia”.

El fiscal subrayó que la Fepade trabaja de manera coordinada con la Secretaría de Gobernación para que ese día prevalezca la paz pública y la gobernabilidad.
 

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