BUFADORA

Durante la presente semana se llevarán a cabo las primeras acciones por parte de los grupos organizados de Ensenada, para que nuestro municipio sea incluido en el paquete de beneficios fiscales que el virtual presidente electo, Andrés Manuel López Obrador (AMLO), prometió en su campaña para la franja fronteriza norte del país, como la reducción del Impuesto al Valor Agregado del 16 al 8 por ciento, así como del Impuesto sobre la Renta del (ISR) del 30 al 20 por ciento.

Y aunque sobran los argumentos que justifican tal petición, como los propios dirigentes de Morena en Ensenada lo han reconocido, es necesario realizar desde ahora las gestiones y no esperar a que López Obrador asuma la presidencia hasta diciembre próximo.

También será importante que en esta solicitud se sume el municipio de Playas de Rosarito y los residentes de San Felipe, que tampoco son considerados con un IVA e ISR diferenciado.

Una oportunidad importante para hacerse escuchar será la visita a Baja California que López Obrador tiene programada para septiembre venidero, cuando esperemos que interlocutores regionales más cercanos al político tabasqueño, lo sensibilicen sobre la conveniencia de catalogar a todos los municipios de la entidad como parte de una región fronteriza que requiere un trato fiscal diferente, circunstancia que nunca entendieron los gobernantes anteriores y actuales del centro del país.

Por tal motivo, la Cámara Nacional de la Industria de Transformación (Canacintra), a través de su dirigente, Alejandro Jara Soria, señaló que Ensenada siempre ha estado integrada a la región fronteriza debido a su aislamiento geográfico, al ser casi una isla rodeada por el Golfo de California y el Océano Pacífico y al sur por más de 600 kilómetros de desierto, de tal forma que sus comunicaciones son al norte con Tijuana, Tecate, Mexicali y los Estados Unidos.

Jara Soria hizo un llamado a todos los partidos, organismos públicos y privados, grupos organizados y a la población en general a sumarse al movimiento #Yo Soy Fronterizo, con el único propósito de luchar porque Ensenada sea considerada en la disminución de impuestos.

Cuchillito de palo
¿Y ahora qué rayos ocurrió con la planta desalinizadora?

Negro panorama
Con base en los contundentes resultados de la elección federal pasada, el escenario que se advierte de cara a los comicios locales de 2019 no pinta nada bien para los partidos Acción Nacional (PAN) y Revolucionario Institucional (PRI), incluso nadie se anima a levantar la mano en ambas fuerzas políticas para anunciar sus aspiraciones de contender por la gubernatura, las alcaldías o diputaciones.

Pero donde la efervescencia se observa desde el momento en que se dio a conocer su victoria, hace ya más de un mes, es en el partido Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), que el año entrante no tendrá necesidad de aliarse con ningún otro partido, porque en las anteriores votaciones estatales (2016) el Partido del Trabajo (PT) no alcanzó el 3 por ciento de los sufragios para conservar el registro en Baja California, y en 2019 podrá competir gracias a que conserva su registro federal, pero lo hará sin poder coaligarse y tampoco recibirá financiamiento público estatal; en tanto el Partido Encuentro Social (PES) perdió su registro a pesar de haberse sumado a Morena.

Así que Morena tiene la mesa puesta en Baja California y Ensenada; y ahora lo interesante será atestiguar si en 2019 postula a ciudadanos que no precisamente militen en ese partido. Y otro factor a considerar en la repartición de candidaturas será la forma en que cumplirán con los criterios de paridad de género.

Lo único que podría darle respiración artificial a los priistas y panistas de Ensenada a partir de enero del próximo año, es que no se redujera el IVA y el ISR en el municipio, porque si bien no fue una promesa expresa de AMLO, sí representaría otro durísimo golpe para la ya de por sí deteriorada economía porteña.

Ciertamente pueden ocurrir muchas cosas en los siguientes meses, pero recuperarse de una derrota electoral de tales proporciones no es fácil en el corto plazo, a menos que la gente de Morena en Ensenada pierda piso, se vuelvan loquitos y se hagan pedazos entre ellos.

El quinto elemento
Sin embargo, quienes en 2019 pretendan competir por la presidencia municipal de Ensenada, deben estar conscientes que la deuda del Ayuntamiento podría alcanzar los cuatro mil millones de pesos. Por ende, los hombres y mujeres que sueñen con despachar en el cuarto piso del Palacio Municipal, incluida la posibilidad de que el actual alcalde, Marco Antonio Novelo, busque la reelección, necesitan entender que el reto es de proporciones gigantescas, aunado a que tendrán que contener la escalada de asesinatos, robos y asaltos. La tarea no es sencilla.