Les hace agua la canoa

México, DF - De pronto, en medio de la oscura noche en el Océano Atlántico, un golpazo seguido de estruendo despertó a los pasajeros del Titanic.

Las sirenas comenzaron a sonar, el barco rápidamente comenzó a inclinarse, la gente corrió hacia la cubierta principal donde el capitán, sin mayor preámbulo, les dijo:

-Damas y caballeros, les tengo una noticia buena y otra mala, ¿cuál quieren primero?

-La mala, díganos la mala -corearon los pasajeros.

-Bueno, pues la mala es que el barco chocó contra un iceberg y nos hundimos de manera irremediable. Nada ni nadie podrá evitar que en menos de una hora esta nave termine en el fondo del mar. Además, todo indica que por lo enorme de su tamaño, el barco se partirá en dos haciendo imposible cualquier intento de rescate. Eso provocará, además, un efecto remolino que pondrá en peligro a buena parte de los supervivientes. Y lo peor es que, además, no tenemos suficientes botes salvavidas para todos. 

-¡Uta! ¿Y cuál es la buena, capitán?

-¡¡¡Que vamos a ganar 11 óscares!!!

¿Viste la película Titanic? Si no la viste significa que, si eres hombre, eres un foreveralone. Porque todo macho que se respeta, en algún momento de su vida, ha tenido que chutarse la más de tres horas del melodrama que termina con Leonardo DiCaprio ahogándose en el mar por culpa de Kate Winslet. Si la muchacha se hubiera puesto a dieta, el pobre Leo habría cabido en la balsa y no se hubiera muerto congelado como político caído en desgracia. (Por cierto, si eres mujer y no la has visto, es probable que no seas mujer).

Lo que está pasando en Sonora me recuerda mucho al Titanic. La mina Cananea, del Grupo México, derramó 40 millones de litros de desechos tóxicos que, para decirlo en buen cristiano, le dieron en la madre a los ríos Sonora y Bacanuchi, así como a miles de personas que viven en los alrededores.

¿Y qué tiene que ver esto con el Titanic? Pues que a las autoridades ambientales les está haciendo agua la canoa.

Ya pasaron más de dos semanas y hasta el momento no hay una sola persona en la cárcel por este crimen. A las cosas por su nombre: es un crimen que los infelices de Grupo México, por ahorrarse una lana en el tratamiento de los desechos tóxicos de su mina, los hayan echado al río como si fuera una cubeta de orines. Digo, qué asco la orina, pero no es lo mismo que 40 millones de litros de veneno.

Da la impresión de que a Juan José Guerra Abud, el secretario de Medio Ambiente; y al procurador federal ambiental, Guillermo Haro, como que les tiembla la manita para enfrentar y meter en cintura a la poderosa empresa de Germán Larrea. 

Se supone que hoy darán un informe sobre el caso. Si salen con que "aquí no pasó nada”, confirmarán, una vez más, lo que aquí, antes que en ningún otro lado, te adelantamos: a las autoridades federales les hace agua la canoa.

La NASA informó ayer que la sonda espacial New Horizons está a punto de llegar a la orilla de nuestro sistema solar: al mismísimo Plutón.

El aparato fue lanzado desde la Tierra en el año 2006 y todavía le falta algo así como un año para alcanzar su destino.

La cosa suena muy bien, pero que alguien me explique: ¿cómo es posible que podamos llegar hasta ese rincón del universo y el gobierno de Miguel Mancera nomás no puede reparar la Línea 12 del Metro para llegar a Tláhuac? Misterio cósmico.