Represalias

Lejos estaba de pensarse que surgiría un sisma en el Gobierno del Estado con uno de los sectores más nobles de Baja California y de los más fuertes de la entidad: los hoteleros de Ensenada.

Empresarios turísticos del puerto hicieron públicas las presuntas represalias que sienten por parte del secretario de Turismo de Baja California, Óscar Escobedo Carignan, luego de que se opusieran a la pretensión del funcionario de integrar en uno solo los cuatro fideicomisos de promoción turística que operan en el estado.

Esa oposición parece que les está costando caro, porque ahora varios trámites del Fideicomiso de Promoción Turística de Ensenada están congelados en espera de la firma de Escobedo Carignan.

Por supuesto que ese retraso tiene un impacto negativo, dado que afecta la operatividad del fideicomiso y otros proyectos de promoción de las actividades turísticas locales.

El problema tiene varias lecturas preocupantes; por un lado llama la atención que el Gobierno del Estado permita el surgimiento de un conflicto de esta naturaleza; además es un sector que mueve la economía en el puerto de una manera importante, y no se había visto que surgieran este tipo de problemas, no en esta área que se supone es más amable y donde el terreno es blando para las políticas públicas estatales.Ocurre en un escenario poco favorable para el Gobierno del Estado y el municipio.

El Gobierno del Estado justo el martes anunció un relevo en el gabinete, el del secretario de Salud, precedido hace apenas semanas atrás del cambio del secretario general, y un nuevo conflicto con otro funcionario de alto nivel no es una buena señal, menos en el escenario donde los resultados del gobernador Francisco Vega tampoco se han visto.

Para Ensenada resulta una piedra más en el camino luego del colapso de la Escénica y el desabasto del agua, y claro, todo esto con un fuerte impacto en la economía, y ahora este zipizape con el secretario de Turismo no augura nada bueno.

Si la situación es como la plantean los empresarios locales, el proceder por parte del Gobierno del Estado no deja ver nada bueno en la solución de los problemas, y es una mala señal para quienes difieran de acciones que les sean planteadas.