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Una vida sobre las olas

Jorge McFarland es una leyenda viviente del surf en México con más de 50 años practicando el deporte de sus amores
viernes, 21 de julio de 2017 · 00:00
Ángel Domínguez y Jesús Salazar/EL VIGÍA
adominguez@elvigia.net | Ensenada, BC

A inicios de la década de los sesentas, las playas ensenadenses empezaban a ser ocupadas por jóvenes interesados en retar sus olas, quienes se convirtieron en un parteaguas.
Ignacio Félix, Carlos Hernández, Juan Hussong y Eduardo Echegaray lideraban el grupo que introdujo el surfing en Ensenada, al que posteriormente se unió Jorge McFarland en 1966, a sus escasos 10 años.
San Miguel, 3 M’s, El Pico, California, Carioca, Todos Santos y Stacks fueron los primeros espacios utilizados por quienes asistieron a dos mundiales.
Después de ser punta de lanza de la disciplina, su esfuerzo se vio recompensado cuando representaron a México en Puerto Rico 1988 y Japón 1990.
Con Nacho Félix y Carlos Hernández a la cabeza, en 1966 y 1968 se registran las primeras participaciones de un selectivo azteca en una justa mundial.
Tuvieron que transcurrir dos décadas para que México regresara a tomar parte en un torneo de esta magnitud.

CLASIFICATORIOS EN TERRITORIO NACIONAL
El porteño Jorge McFarland fue el encargado de organizar los Circuitos Nacionales en Río Nexpa, Michoacán; Mazatlán, Sinaloa y Puerto Escondido, Oaxaca.
"En 1985 trajimos concursos estatales y nacionales a San Miguel y en ese tiempo se me ocurrió contactar a la International Surfing Association (ISA), me tomé la libertad de meter la solicitud y pagar la inscripción de 250 dólares”, comentó McFarland.
Al cumplir con los requisitos, agregó, "fui a Nexpa a platicar con todos los directivos de asociaciones para hacer un circuito nacional, clasificatorio al mundial y de ahí se sacó el equipo”.
Roberto Salinas, Memo Méndez, Abraham Sánchez, Ricardo Díaz, entre otros, empiezan a codearse con los principales exponentes del país.
Muchos años antes de que surgiera la figura de Jhony Corzo, actual campeón mundial, "a Puerto Rico fui como gerente general del equipo y a Japón como coach”, informó Jorge "Sach” McFarland.
Medio siglo más tarde, a sus 60 años, en San Juanico, Baja California Sur, como parte de su ritual espiritual, combina la yoga con la práctica del surfing, lo que considera "un estilo de vida muy gratificante física y mentalmente”.
"Sach”, maestro jubilado que comparte tiempo entre Ensenada, su ciudad natal y el sur de la península, ‘corrió’ sus primeras olas en 1966.
Sin alejarse de sus orígenes, de 1984 a 1991 dirigió la empresa Scorpio Surfing Tours, dedicada a transportar a Isla Natividad "surfos” profesionales como Tom Curren, Mike Parsons y el 11 veces campeón del mundo Kelly Slater.
El viaje, apuntó, incluía fotógrafo de la talla de Aarón Chang y Larry Flame Moore, quien se encargaban de captar cada uno de sus movimientos dentro del mar, así como traslado en avioneta, alimentación y hospedaje.
Dichas aventuras, que se programaban "dos veces por semana en verano”, no estuvieron exentas de incidentes, ya que las aeronaves llegaron a "sufrir la quemadura de un motor”, entre muchos otros.
El ex presidente de la Asociación de Surfing de Baja California, obtuvo el Campeonato Nacional Máster en 1998 y en 2015 dominó la categoría Grand Kahuna.
Actualmente, su hijo Dylan se prepara con miras a la competencia nacional, que se llevará a cabo del 9 al 12 de diciembre en Tecomán, Colima (Boca de Pascuales).

ROMANCE CON LAS OLAS
"Supe que era surfer como a los 12 años, cuando estaba con mi mamá y mis hermanos en un lugar que se llama Manhattan Beach, allá por Los Ángeles, y estaban grandísimas las olas, así que me retaron y aunque las olas me sacudieron, me di cuenta que si lo hacía, podría meterme en cualquier lado”.
Mc0Farland se retira en 1990 del surfing competitivo para dedicarse por completo a la familia y decide volver dos décadas más tarde.

PUEBLO MÁGICO
El flechazo entre Jorge McFarland y San Juanico se dio en 1980 durante un viaje al que fue acompañado por Eduardo Echegaray, Pancho Corral y Juan Hussong.
"Es un pueblo mágico del que me enamoré, con gente amable y es un lugar perfecto para establecerse”, concluyó.

"Lo más bonito de los nacionales y mundiales es que conoces gente de naciones como Australia, Japón, Estados Unidos y de esa manera se abren invitaciones”.
Jorge McFarland
Surfista

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