Rechaza taxista infligir agresión

San Quintín, B. C. - Rosendo Macías Guerrero, taxista que fue víctima de un intento de homicidio, que no asalto, ocurrido la tarde del pasado domingo, enfatizó que él no tuvo nada que ver con las lesiones que presentó posteriormente el presunto asaltante.

En afán de patentizar su inocencia en el caso, por el encabezado de la nota publicada en El Valle ayer, el trabajador del volante acudió a las oficinas de esta sección de El Vigía para tal efecto.

Acompañado por Jesús Núñez Santiago, secretario general del Sindicato Nacional de Trabajadores del Autotransporte Fernando Amilpa, Sección 42, el delegado de Ruta de Taxis de este organismo negó haber actuado con violencia contra el lesionado.

Refirió de viva voz que esa tarde –alrededor de las 16:00 horas del domingo– quien se sabría después que se llama Saúl Javier Castro Mena, de 26 años, éste individuo abordó su taxi (de Rosendo Macías) con la intención de asesinarlo.

Abundó que al llegar al fraccionamiento San Fernando, con pistola en mano Castro Mena le indicó que se dirigiera hacia el cerro "porque ahí te voy a matar”, a lo que él respondió que no.

Y en seguida cogió el cuchillo que llevaba en la puerta del taxi –una vagoneta– y comenzó a forcejear con el hombre que, según él, tenía intenciones de asesinarlo. Después, este individuo "se bajó del taxi y corrió hacia una camioneta que estaba cerca”.

Afirmó que posteriormente se pudo percatar que dentro de esta unidad –Chevrolet Blazer, negra– había tres hombres, más el ahora lesionado, uno de los cuales conoce con el nombre de Vladimir. Esta unidad  está a disposición de la PGJE.

Esta persona, agregó, tiene un adeudo con él de 2 mil pesos, dinero que le entregó a cambio de un motor para su vehículo, el cual nunca recibió.

Ambos transportistas pidieron al subprocurador de Justicia Zona Ensenada, Marco Antonio Chavarría López, que investigue a fondo a los cuatro hombres, porque quieren saber quién mandó a la persona que agredió a Rosendo Macías.

Por último, hicieron responsable a dichos individuos de cualquier agresión que pudiera ocurrir en la persona, propiedad y/o familia del taxista afectado. "Y que se aclare dónde quedó la pistola (con que lo amagó), porque en el taxi sólo apareció el cargador”.

Con base en lo declarado por Saúl Javier Castro Mena, fue el taxista quien lo lesionó con un arma prohibida (cuchillo) luego que él no tuvo para pagar el viaje –sólo llevaba consigo ocho pesos, y no los 20 que le costó el viaje.

Esto fue informado por el Agente del Ministerio Público del Fuero Común, Receptora San Quintín, quien indicó que las investigaciones sobre el hecho siguen en curso.