El Valle

YO SOY SAN QUINTÍN

lunes, 18 de diciembre de 2017 · 00:00

AGUINALDOS

El aguinaldo, prestación irrenunciable que se establece como derecho de los trabajadores por la Ley Federal de Trabajo, igual que a cualquier mortal e hijo de vecino, como se dice popularmente, también les corresponde a los empleados de Gobierno mejor conocidos como burócratas.

Días atrás, se informó un acuerdo de cabildo del XXII Ayuntamiento que se autorizó al alcalde, secretario y tesorera municipal a adquirir créditos para cubrir los gastos de operación que corresponden al cierre del ejercicio fiscal entre la que se cuenta la obligación del pago de los esperados aguinaldos.

La noticia tomó importancia cuando, a pesar de los anuncios hechos con anticipación por el presidente municipal Marco Novelo, hasta el pasado viernes no habían sido depositados esos dineros a la totalidad de los empleados municipales.

Por otra parte, también se hizo público que algunos otros empleados del ayuntamientos están resultando afectados por la omisión del pago de algunos prestamos de los que los descuentos efectuados vía nómina no fueron entregados a las instituciones financieras correspondientes, lo que llevó a los afectados quienes según ellos habían estado pagando en tiempo y forma sus créditos, a recibir la sorpresa de que esto no había ocurrido. Cabe mencionar que éste último asunto es uno más de los heredados de la anterior administración municipal.

La mención de estos temas, es porque indudablemente los efectos alcanzarán a nuestra región, cualquiera que sea el tema, a pesar de los pesares, seguimos siendo parte del municipio de Ensenada y cualquier cosa que haya afectado en otras ocasiones, en tiempos de crisis financieras de la cabecera municipal, la zona sur nunca ha salido ilesa.

La reducción del gasto corriente, la posible cancelación de obras, la desviación de recursos destinados al sur, entre otras afectaciones, son las sombras que se asoman en estos casos.

Por otra parte, si no se ha enterado, déjeme comentarle que nuestros ilustres regidores aprobaron un sustancial incremento a las infracciones de tránsito, con el argumento de que el hecho de que el monto de las multas sea más alto, por esa simple razón se reducirán los accidentes y hechos de tránsito.

No es que no sea posible ese efecto, pero la verdad es que eso nunca ha ocurrido en otros casos, mucho menos en un Estado como el nuestro donde los autos irregulares ocupan gran parte del parque vehicular que transita por la entidad, de San Quintín y sus alrededores, para que le cuento. Un efecto que sí le aseguro que va a ocurrir, es que el nuevo costo de las infracciones provocará que el tamaño de la “mordida” sea mayor. Si no me cree, lo invito a que en unos meses revisemos las estadísticas y verifiquemos, si es que eso fuera posible, si el número de infracciones municipales que se aplican en Ensenada y el incremento de los ingresos en tesorería municipal por estos conceptos es notable.

Con lo que podremos ver si el alcalde y su cabildo tenían razón, si los ciudadanos optaron por ser más precavidos y se reduce el número de accidentes o se mantiene la frecuencia de los hechos de tránsito y, de pilón, se entera que los “arreglos” con la autoridad ahora cuestan un poco más.



 

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