En contexto. México: suelo fértil para la corrupción

Para Eric Uslaner, estudioso de las causas de la corrupción en el mundo,un sistema nacional anticorrupción puede no servir de nada, si no se combaten las causas profundas de este mal
jueves, 5 de marzo de 2015 · 00:00
AGENCIA REFORMA
México, D. F.
 
México: suelo fértil para la corrupción

La desigualdad social alimenta la corrupción y ésta, a su vez, hace más amplia la brecha entre ricos y pobres. Un sistema nacional anticorrupción puede no servir de nada, si no se combaten las causas profundas de este mal.
Crear un plan nacional anticorrupción es tratar de hacer algo sin hacerlo, afirma Eric Uslaner, estudioso de las causas de la corrupción en el mundo.
Desde su punto de vista, las comisiones anticorrupción no son efectivas porque suelen reflejar los intereses del poder, "los intereses de los encargados del show”.
Además, la corrupción es como la mala hierba: si pones a algunos corruptos en la cárcel, siempre salen otros después de ellos. No cesan a menos de que cambies el suelo por completo.
Para combatir efectivamente la corrupción se deben entender cuáles son sus raíces históricas: la desigualdad y la desconfianza social.
La corrupción crece de esas raíces y abona a la llamada "trampa de la desigualdad”. Es una especie de círculo vicioso: la desigualdad y la desconfianza generan corrupción y, a su vez, la corrupción acentúa la desigualdad y alimenta la desconfianza.
Ésa es la principal razón por la que la corrupción persiste y por qué es tan difícil de erradicar, asegura el experto, autor del libro "Corruption, Inequality, and the Rule of Law” ("Corrupción, desigualdad y estado de derecho”), publicado en 2008.
 

Desigualdad por ley

Uslaner vino a México hace unos días para impartir una conferencia en el ITAM, precisamente sobre las raíces históricas de la corrupción.
No había venido al país desde 1976, aquel año emblemático por el golpe al Excélsior de Julio Scherer y el inicio del sexenio de José López Portillo, el ex presidente emblema de la corrupción. Casi con admiración, el académico comenta que hoy ve un México más próspero, pero no le sorprenden los escándalos de corrupción en un país con una larga historia de desigualdad. En su libro, aclara que la desigualdad no sólo es económica, sino también ante la ley.
Profesor en la Universidad de Maryland, Uslaner vive en uno de los condados de la Unión Americana con mayor tasa de graduados universitarios y, en sus palabras, "con un gobierno más limpio que un consultorio dental”.
Entre las preguntas que le han planteado a lo largo de los años están las siguientes: "¿Qué hace que en algunas sociedades predomine la honestidad y en otras la corrupción? ¿Qué hacer para erradicar, o por lo menos reducir, la corrupción?”.
El catedrático afirma categóricamente que algunas explicaciones de por qué hay corrupción simplemente se equivocan. Una es la llamada perspectiva de la maldición de los recursos, como el petróleo, que sostiene que bajo esos contextos los políticos buscan beneficios privados a través del otorgamiento de contratos. Pero Noruega y el Reino Unido también tienen petróleo, y eso no los ha corrompido, asevera. En Botswana, los diamantes han ayudado a sacar a mucha gente de la pobreza a través de políticas adecuadas para ello. Tampoco le convence la idea de que la corrupción sea un problema cultural. "La corrupción la ves en distintas culturas y sistemas políticos”, afirma.
Por otro lado, algunas soluciones que se proponen en contra de la corrupción no son tan efectivas. Procurar una mayor transparencia ayuda, en teoría, pero no siempre tiene los resultados esperados en la práctica.
 

Relaciones sociales

Asistido por sus datos, análisis y gráficas, el también autor de "The Moral Foundations of Trust” ("Las bases morales de la confianza”), argumenta que las instituciones democráticas no han sido un antídoto contra la corrupción. Las elecciones democráticas también crean liderazgos corruptos, comenta, y las relaciones clientelares en las elecciones son parte de la corrupción. El tema de fondo es cambiar las relaciones sociales en el país.
Para ello, la educación pública universal ha sido un factor fundamental de cambio. La persistencia de la corrupción indica que sus raíces son profundas y muy difíciles de arrancar, y que radican en factores de largo plazo y no en cambios institucionales recientes. El pasado importa, concluye.
Su investigación más reciente muestra que los niveles históricos de educación en 1870 son el factor explicativo más importante de los niveles de corrupción en 2010, 140 años más tarde. Las implicaciones apuntan a las políticas de educación universal. Hay que mirar casos como Austria en el siglo XIX, o Corea del Sur, Hong Kong y Singapur, más recientemente. Los dos últimos casos ilustran muy bien que se puede romper "la trampa de la desigualdad”.
La educación universal crea fuertes lazos entre los diversos grupos sociales y hace menos probable la competencia electoral basada en el clientelismo y en las prácticas corruptas.
El pasado importa, pero los países se pueden emparejar. No es fácil, pero hay esperanza, afirma. Para ello es fundamental cambiar el suelo, cambiar las relaciones sociales que prevalecen en un país.
Las medidas contra la corrupción basadas en la creación de organismos o instituciones no han logrado ser muy efectivas. Son como una imploración al cielo para tener menos corrupción, pero sin hacer nada sustancial, afirma.
Los casos de éxito en el combate contra la corrupción sugieren que es importante tener una economía abierta, pero también hacer sentir a los ciudadanos ordinarios que ellos importan.
La educación pública universal abona significativamente a ello, ya que permite a la gente tener una mayor oportunidad para avanzar.
 

Desigualdad y desconfianza

La corrupción forma parte de un círculo vicioso junto con la desigualdad y la desconfianza. Y en México prevalecen ambas. Se trata de una sociedad con altos niveles de desigualdad y con altos niveles de desconfianza social. Según la mayoría de las encuestas internacionales, muy pocos mexicanos confían en el resto de la gente.
Según Uslaner, la corrupción encuentra un suelo propicio para crecer en esa combinación, bajo contextos donde las diferencias entre ricos y pobres son muy marcadas, y donde los individuos desconfían en los demás.
Las políticas y las instituciones de transparencia ayudan, pero no erradican porque no llegan a las raíces de esa mala hierba. La creciente prosperidad de México sienta las bases para construir mejores oportunidades para la gente y para sus hijos. Si la desigualdad es muy marcada, es probable que las élites lleven a cabo políticas socialmente dañinas. La educación pública universal es una señal inequívoca del Estado a sus ciudadanos de que éste atiende más allá de los intereses particularistas de las élites políticas y económicas.
Para las nuevas generaciones de mexicanos que ven a su alrededor actos de corrupción, Uslaner tiene una recomendación:
"Que se organicen. Que se organicen en movimientos políticos que demanden menos corrupción. Así se redujo en Nueva York en los años cincuenta. Pero, sobre todo, que demanden una mayor y mejor educación. Que demanden cambios en la política gubernamental para crear un mayor bienestar social”.
 

Nuevo modelo anticorrupción

El sistema creado por los diputados esta semana, que deberá ser ratificado por el Senado, funcionará así:
1. Sistema Nacional Anticorrupción
*Pretende homologar acciones entre los diferentes órdenes de gobierno para la generación de mayores estándares de integridad pública.
*Tendrá un Comité de Participación Ciudadana conformado por cinco mexicanos destacados por su contribución a la rendición de cuentas.
*Un comité coordinador con los titulares de la ASF, la Fiscalía Anticorrupción, la SFP, el Tribunal Federal de Justicia Administrativa, el Ifai, y representantes del Consejo de la Judicatura Federal y del Comité de Participación Ciudadana.
*Deberá contar con una Ley General que coordine a las autoridades de los distintos órdenes de gobierno.
2. Secretaría de la Función Pública
*Ratificación de su titular en el Senado, para darle autonomía respecto del Ejecutivo.
*La Cámara de Diputados nombrará a los titulares de Órganos Internos de Control.
3. Auditoría Superior de la Federación
*Conocerá de asuntos locales, a petición de congresos estatales.
* Podrá ejecutar extinción de dominio en casos de enriquecimiento ilícito.
*Practicará auditorías en tiempo real.
4. Tribunal de Justicia Administrativa
*Conformado por 16 magistrados propuestos por el presidente y ratificados por el senado.
*Una especie de Tribunal de Cuentas para sancionar faltas graves en el ejercicio de recursos públicos.
5. Fiscalía Anticorrupción

*Creada desde la reforma política de 2013.
*Nombramiento pendiente en el Senado de la República.


"La corrupción es persistente y hay poca evidencia de que los países puedan escapar de este mal con facilidad. Las raíces de la corrupción yacen en la desigualdad económica y legal, en los bajos niveles de confianza social, y en las pobres decisiones de política pública”.
Extracto de Corruption, Inequality, and the Rule of Law (Cambridge University Press, 2008).

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