Misiones de las Californias XLIII: Misión de San Miguel Arcángel

CARLOS LAZCANO/COLABORACIÓN
carloslascano@hotmail.com | Ensenada, B. C.

La misión de San Miguel Arcángel fue la séptima de las misiones fundadas por el padre presidente de las misiones de Alta California, fray Fermín Francisco de Lasuén. Es la misión número 43 de las Californias y la número 16 de la Alta California. Fue además la segunda misión dedicada a San Miguel Arcángel, ya que diez años antes, en 1787, en la Antigua California los dominicos habían establecido la misión de San Miguel Arcángel de la Frontera, la más norteña de las misiones peninsulares.

Actualmente esta vieja misión funciona como parroquia católica y se encuentra en el pueblo de San Miguel, California, dentro del condado de San Luis Obispo.

La misión fue establecida el 25 de julio de 1797 dentro del territorio de los indios salinas, quienes recibieron bien a los misioneros. La fundación quedó a cargo de los padres Buenaventura Sitjar y Antonio Horra, aunque ambos pronto fueron reemplazados por los misioneros Juan Martín y Baltasar Carnicer. Uno de los objetivos de esta misión fue la de ser un punto intermedio entre las misiones de San Antonio y San Luis Obispo.

Al momento de la fundación, se levantó una capilla provisional y, al año siguiente, dio principio la construcción de un templo de adobe mucho más amplio. Poco a poco se amplió con un convento, granero, talleres y viviendas para los neófitos. En 1806, un fuerte incendio afectó al templo y a otras construcciones, por lo que en 1816 dio inicio la construcción de un templo nuevo: una iglesia de adobe, tejado y fachada sencilla. Fue terminado en 1821 con bellas decoraciones hechas por los indios neófitos bajo la dirección del pintor catalán Esteban Munrás.

En 1801 los dos padre residentes enfermaron por envenenamiento, lográndose atrapar a los culpables, quienes sufrieron azotes. Poco después el padre Francisco Pujol murió envenenado.

MISIÓN PRÓSPERA
Hacia 1814 esta misión tuvo su mayor población indígena, mil noventa y seis neófitos. Fue una misión próspera que llegó a tener más de 9 mil cabezas de ganado y 13 mil 500 ovejas entre 1811 y 1824, además de una vasta producción agrícola que incluía trigo, cebada, maíz, frijol y arvejas.

El padre Vicente Cabot trabajó 23 años en esta misión logrando su gran prosperidad. Cuando la misión fue secularizada, en 1834, el padre Cabot pidió su retiro, ya que no quiso ver como la misión entraría en decadencia. Su decadencia fue rápida y para 1841 sólo le quedaban 200 indígenas. La misión fue comprada el 4 de julio de 1846 por Petronilo Ríos y William Reed. Reed ocupó la misión junto con su familia, y dos años después todos fueron asesinados, incluyendo a los criados, por soldados estadounidenses ávidos de oro. Las instalaciones de la misión se utilizaron como cantina, hotel y tienda. En 1859 el Gobierno regresó la misión a la Iglesia católica y no fue sino hasta 1878 que retomó actividades como parroquia. En 1928 regresaron a ella los padres franciscanos, quienes la ocupan hasta la fecha.

El 22 de diciembre del 2003, el viejo templo resultó con graves daños debido a un fuerte terremoto. Las paredes de adobe quedaron muy afectadas por lo que la misión fue cerrada al público, reabriéndose en el 2005, después de un proceso de restauración y reforzamiento.

Debido a su importancia histórica, en el año 2006 el Gobierno de Estados Unidos dio la categoría a esta misión de “Hito Histórico Nacional”, considerando a su arquitectura representativa del estilo colonial español.

¿QUIÉN FUE EL FUNDADOR DE ESTA MISIÓN?
Fue fray Fermín Francisco de Lasuén el fundador de esta misión, como ya lo mencionamos. Este gran misionero, quien sucedió a fray Junípero Serra en la presidencia de las misiones de la Alta California, nació en Vitoria, España, en 1736. Ingresó a la orden franciscana y a partir de 1751 se le consideró fraile. A los 23 años fue enviado a la Nueva España, asignándosele a las misiones de Sierra Gorda, actualmente en el Estado de Querétaro. Ahí nació su relación con fray Junípero Serra. Estuvo en Sierra Gorda hasta 1767, cuando formó parte del grupo de misioneros franciscanos que fueron enviados a las misiones de la Antigua California. Posteriormente pasó a las misiones de la Alta California, de las cuales llegó a ser presidente a partir de 1784, año en que muere fray Junípero.

Permaneció como presidente hasta su muerte, ocurrida en la misión de San Carlos Borromeo el 26 de junio de 1803. Durante ese lapso fundó nueve misiones que son: Santa Bárbara, Purísima Concepción, Santa Cruz, Nuestra Señora de la Soledad, San José, San Juan Bautista, San Miguel Arcángel, San Fernando Rey, San Luis Rey.

SAN MIGUEL ARCÁNGEL, EL PATRONO DE ESTA MISIÓN
En la iglesia católica (igual en la islámica, judía y cristianas) se considera a San Miguel Arcángel, o Arcángel San Miguel, la máxima autoridad de los ejércitos de Dios frente al mal. También se le considera el protector de la Iglesia y de la humanidad frente al mal, es el protector universal.

Está considerado como el primero de los siete arcángeles, con Uriel, Rafael y Gabriel. Su principal enemigo es Satanás, el arcángel de los ángeles caídos.