Principal

La Laguna Manuela

Es parte del área natural protegida del Valle de los Cirios y una de las regiones naturales mejor conservadas de México, para meterse al mar de aguas agradables, encender la fogata, sentir al viento, observar el horizonte y visitar el conchero. Esperamos se que conserve así, durante un tiempo infinito
sábado, 3 de noviembre de 2018 · 00:00

CARLOS LAZCANO/COLABORACIÓN
carloslascano@hotmail.com | Ensenada, B. C.

En la parte sur del municipio de Ensenada, ya casi para llegar al estado de Baja California Sur, muy cerca de Guerrero Negro, se localiza la Laguna Manuela, asociada a las lagunas marinas de Ojo de Liebre, famosas por la presencia de las ballenas grises que, cada año, recalan en ellas hacia el final y principio de cada año.

La Laguna Manuela es poco conocida y carece de todo tipo de servicios, por lo cual conserva a la perfección su esencia natural y todo ese encanto que le da el aislamiento.

Con frecuencia la visito y acampo en ella con mi familia. Mucho disfrutamos su belleza y entorno. En el último viaje pudimos apreciar decenas de ballenas que felices nadaban frente a la laguna, ofreciéndonos un espectáculo único desde tierra. Se les apreciaba fácilmente por su perfil negro y porque de vez en cuando arrojaban su gran chorro de agua, el cual rompía el horizonte.

Al pie de la laguna se encuentra el cerro de Santo Domingo, y desde lo alto de éste se aprecia el gran horizonte de la laguna y su entorno costero y marítimo.

Se ven volar a grandes parvadas de pelícanos y gaviotas. En la playa de la orilla de la laguna se aprecia a numerosos grupos de muchas especies de aves: tildillos, costureros, gaviotas, gallitos, etcétera.

Durante un tiempo inmemorial esta región fue ocupada los antiguos indios californios, quienes a través de diversos vestigios nos han dejado huella de su presencia, principalmente por los concheros de la costa del Pacífico. En la laguna existe un gran conchero que nos habla de estos antiguos grupos. En él han sido encontradas diversas herramientas de piedra y concha, las que nos hablan de las formas de vida de estos antiguos habitantes. Su antigüedad quizá se remonta 7 u 8 mil años atrás. Cuando los españoles llegaron a estas regiones vivían en la zona central de la península grupos cochimí, los que llegaron a ocupar la Laguna Manuela.

EXPEDICIONES EUROPEAS
Los primeros europeos que pasaron por esta región fueron los navegantes de la expedición de Francisco de Ulloa (1539-1540). Estos navegantes habían salido de Acapulco, para seguir explorando la costa del Pacífico Norte de la Nueva España. Acamparon durante tres meses en la isla de Cedros y al continuar pasaron frente a la Laguna Manuela, pero no se detuvieron. Posteriormente pasó la navegación de Juan Rodríguez Cabrillo (1542-1543) que, igualmente, no se detuvo.

Sesenta años después, fue el navegante Sebastián Vizcaíno quien pasó frente a la laguna durante su expedición (1602-1603). Este navegante realizó el mapa de toda la costa del Pacífico de Baja California, incluyendo la región de la laguna.

A partir de 1565, empezaron a llevarse a cabo las navegaciones del Galeón de Manila que, desde Manila, Filipinas, cruzaban todo el océano Pacífico arribando a la costa de la alta California. De ahí venían bordeando toda la península, hasta llegar a la costa de la Nueva España y finalmente llegar a Acapulco.

Llegó a ser una de las rutas comerciales más largas e importantes del mundo y funcionó durante 250 años. Cada año, el galeón pasaba frente a la costa de la Laguna Manuela. En el año de 1576, llegó a las costas bajacalifornianas el galeón San Felipe. Sin embargo venía muy deteriorado y quizá sus tripulantes muy enfermos o cansados por la larga travesía (duraba entre 4 y 6 meses). El hecho es que este galeón encalló y naufragó muy cerca de la Laguna Manuela, un poco al sur. Nunca se supo cuál fue la suerte de sus tripulantes y viajeros.

Los vestigios de este galeón fueron encontrados en el año 2002 enterrados entre la arena de la zona de dunas al sur de la Manuela. En 1751 el misionero jesuita Fernando Consag exploró la región de la Laguna Manuela encontrando algunos vestigios del galeón San Felipe.

Fue el padre Consag el primer europeo en llegar por tierra a la Manuela, en el mencionado año de 1751. Anteriormente Consag ya había fundado la misión de Santa Gertrudis La Magna, la primera establecida en el actual territorio del estado de Baja California.

BELLEZA DE LA SOLEDAD
En nuestros días la Laguna Manuela se encuentra muy cerca de las comunidades de Villa Jesús María y Morelos. En ella se reúnen los pescadores, ahí tiene su campo pesquero y todos los días salen temprano al mar abierto para ganarse de esta manera su sustento.

Las veces que he acampado ahí siempre les compro algo de pescado o calamar, para preparar ricos platillos campiranos. Ambas comunidades son pueblos muy chicos, de unos cuantos cientos de habitantes. A 40 kilómetros al sur está Guerrero Negro, que con sus 15 mil pobladores es el centro urbano más importante de la región central de la península de Baja California.

Es la belleza, es la soledad, es su naturaleza bien conservada la que cada año me invita de regresar a este sitio, para mí, maravilloso.

Aquí he visto atardeceres fuera de serie. Con un cielo tan limpio como el de esta región, se puede apreciar en todo su esplendor el cielo estrellado. Acampar aquí es una grata experiencia, sobre todo cuando se hace con la familia. Meterse al mar, que aquí es tranquilo y de aguas agradables, comentar las experiencias, visitar el conchero, encender la fogata, sentir al viento, observar el horizonte, perseguir a las aves. Pero sobre todo, sentir la soledad y estar ahí, en medio de esa naturaleza única. Así es la Laguna Manuela.

La Laguna Manuela es parte del área natural protegida llamada Valle de los Cirios, una de las regiones naturales mejor conservadas de México.

Por lo tanto está protegida por las leyes y esperamos se conserve, así natural, durante un tiempo infinito.

Por lo pronto, si tú, estimado lector, visitas este espacio, no olvides respetar las reglas básicas de quienes amamos la naturaleza: no matar nada más que el tiempo, no dejar nada más que la huella de los pies (nada de basura) y no tomar nada más que fotografías.

Si visitas, respeta las reglas
Si tú, estimado lector, visitas este espacio, no olvides respetar las reglas básicas de quienes amamos la naturaleza:

  1. No matar nada más que el tiempo
  2. No dejar nada más que la huella de los pies (nada de basura)
  3. No tomar nada más que fotografías

...

Galería de fotos

Comentarios