Breves comentarios sobre arte (Séptima parte)

Cómo de todos es sabido el siglo XIX debido a los avances en los campos científicos y tecnológicos provocó cambios en la forma de vida y en el terreno de las ideologías.

Las necesidades de las ciudades ya industrializadas trajeron un renacimiento en la arquitectura que ofrece un estilo distinto debido al uso de los materiales que no habían sido utilizados en épocas pasadas. 

Como lo son el hierro y el hormigón armado que dio paso y permitió la edificación de grandes y sólidos edificios de gran altura.

Ya los muros para entonces dejaron de ser el soporte base. Se abrieron grandes vanos de iluminación y ventilación y el uso del vidrio se tornó importante.

Estamos hablando de una arquitectura vertical que con el tiempo dio nacimiento a los grandes rascacielos.

Hay edificios relacionados con el proceso industrial como lo son las fábricas, almacenes, entre otros.

Edificios construidos a ex profeso para la enseñanza y la cultura como son las escuelas, museos, bibliotecas y otros para teatros e hipódromos.

Los hay desde luego aquellos adecuados para hospitales, otros para ferrocarriles y aeropuertos, los dedicados a la vivienda. 

Dicen que el inicio de la arquitectura contemporánea está relacionada con la escuela de Chicago, Estados Unidos, que aportó una nueva concepción de la arquitectura.

Le Corbusier, arquitecto francés, difusor de las ideas racionalistas sostuvo que la sociedad es sana y debe estar siempre en relación con la naturaleza. 

El arquitecto debe ofrecer a la sociedad una condición natural de existencia sin que ello detenga el desarrollo tecnológico. 

Brasilia es un ejemplo de la aplicación de los principios urbanísticos racionalistas. También dentro del racionalismo están las numerosas realizaciones del británico James Stirling en varias ciudades como Londres, Cambridge, Dusseldorf, Florencia, Teherán y Roma.

En las Olimpiadas en Barcelona en 1992 estuvo presente el clasicismo postmoderno cuyo máximo exponente es el español Ricardo Bofill, y Kenzo Tange, arquitecto japonés, artífice del diseño urbanístico de Abuja, nueva capital de Nigeria.  

La evolución ideológica del siglo XX nos ofrece un nuevo lenguaje plástico. La estética occidental entra en crisis. El uso de toda clase de materiales, el abandono de la rigidez académica, la preferencia por el color, la desintegración de las figuras y objetos son consecuencia de la revolución en las artes.

Hay una gran variedad de movimientos pictóricos (ismos) que se crean al mismo tiempo. En todos ellos destaca el cubismo, el surrealismo y el abstractismo.

El Cubismo nace en 1907 con "Les Mademoiselles d´Avignon”, de Pablo Picasso. Esta corriente pretende reproducir la verdad abstracta liberándola de la realidad. No se pinta lo que se ve sino lo que sabemos, se yuxtaponen en la tela los diversos aspectos  que ofrece la realidad vista desde ángulos diferentes y en distintos momentos. El objeto se descompone en formas angulares, reduciéndolo a volúmenes geométricos.

La influencia en la cultura y arquitectura es enorme. Los más representativos son Picasso, Juan Gris y George Braque.

El Surrealismo salió del dadaísmo, movimiento de negación integral, verdadera protesta contra la razón. Proclama la omnipotencia de la imaginación, sin que se ejerza control alguno por la razón. 

Se propuso para captar las profundidades subconscientes  del alma humana y sacarlas a la superficie, expresándolas en formas o en palabras mediante un simbolismo apropiado. Los pintores más representativos son Marcel Duchamp, Juan Miró y Salvador Dalí. 

El Abstractismo es el arte abstracto o no figurativo y representa formas que no imiten la naturaleza. A inicios de 1931 un gran número de artistas crearon una asociación. A pesar de las diferencias de estilo y personalidad, puede hablarse de una tendencia común hacia un arte constructivo y concreto en que la forma adquierió más importancia que el color. Kandinsky y Mondrían son los más representativos.

Es de destacarse la innovadora pintura mexicana que ha dado un gigantesco paso desde el frío academicismo de la etapa virreinal.

Sus creadores más destacados son Joaquin Clausell, impresionista, Francisco Goitia y los muralistas José Clemente Orozco, Diego Rivera, David Alfaro Siqueiros y al gran Tamayo.

Entre las últimas tendencias  hay que destacar el Informalismo y la nueva figuración. Que incorporan a sus obras nuevos materiales como tierra, trapos, objetos etcétera.

La nueva figuración se caracteriza por representar figuras y objetos distorsionados, más o menos conectados con la realidad.

Dado que la escultura es construida por encargo, no queda ya en el interior de propiedades privadas, sino que sale a la calle para entrar a formar parte del conjunto urbanístico. La utilización de esculturas hechas con materiales industriales (hierro, aluminio o plástico) da una nueva dimensión a las obras.

Escritor ensenadense.