Proyectos de arte y oportunidades

El proceso creativo como parte de un proyecto artístico, es una investigación que involucra teoría y práctica en la disciplina
domingo, 7 de mayo de 2017 · 00:00
Por Minerva Muñoz*

El desarrollo de un proyecto artístico representa una inversión de recursos creativos, físicos, materiales y de tiempo, que sin lugar a dudas requieren de soporte.
Proyectar es lanzar, dirigir, idear, hacer visible, formar una imagen de lo que se desea  materializar, y al hacerlo destinar recursos para la realización de objetivos con el fin de obtener el producto deseado.
Mas allá de de ser un documento que describe, justifica, organiza y plantea objetivos para la creación de un objeto artístico -ya sea una pintura, escultura, obra de teatro, composición musical o coreográfica, conferencias, talleres entre muchas más actividades- el proyecto artístico es una visualización, punto de partida y a la vez un mapa con trazos delimitados para concretar ideas.
El proceso creativo como parte de un proyecto artístico, es una investigación que involucra tanto teoría como práctica en la disciplina; es una actividad creadora. 
Este proceso involucra el estudio, la reflexión y prácticas dentro de la disciplina -y fuera de ella si es que el proyecto lo requiere- que fundamentan y justifican actividades, necesidades (como recursos humanos, económicos y técnicos), así como el o los productos resultado del proyecto.
Pero para ello se requiere de oportunidades, es decir, debe darse la pertinencia en tiempo, lugar y forma. Más, las oportunidades están relacionadas con los recursos. Con esto me refiero a contar con los recursos humanos, económicos, técnicos, espacios, tiempo y demás requerimientos para se optima ejecución; esto es, tener una infraestructura que sustente, soporte, sostenga y posibilite la realización del proyecto.

Recortes y vacíos 
En muchos momentos -si es que las actividades económicas del artista lo permiten, ya sea dando clases de su disciplina o dedicándose a otras actividades que le permitan la subsistencia y parte de ello destinarlo a su producción artística- los recursos para la realización de proyectos independientes e incluso institucionales, !son propios! y por lo tanto muy limitados. 
Esto a su vez limita los procesos, investigaciones o producción, y por lo tanto, el desarrollo, realización y consolidación del proyecto artístico. 
Si resaltamos la falta de personal especializado, o pocas herramientas propias dentro de los saberes del artista, en la gestión, promoción, difusión y mercadeo de proyectos artísticos, estos tendrán poco presencia, impacto o notoriedad. 
Peor aún, si el artista o aspirante a serlo, carece de herramientas técnicas propias de la disciplina, de referentes de su arte, disciplina o de una actitud profesional, esta frito.
Además, si a esto agregamos los recortes presupuestales recurrentes, la falta de interés y competencia de algunos funcionarios del ámbito cultural y artístico, y la apatía generalizada hacia las actividades artísticas, el panorama parece desolador.
El trabajo es mucho, sobre todo cuando los artistas además de su quehacer artístico poco valorado y pobremente remunerado, deben realizar actividades fuera de su profesión para sobrevivir y producir artísticamente, pero la más ardua labor es la de  evidenciar de manera constante el papel que tiene el arte y la cultura en la sociedad y los individuos, principalmente ante las autoridades encargadas de preservar, promover, difundir, gestionar, propiciar el acceso y la participación de la cultura y el arte en nuestra sociedad. 



Contribución y apoyo  
Debemos enfrentar la acotada visión de algunos funcionarios y administrativos que solo necesitan números y no alcanzan a percibir el impacto, alcance, proyección y posibilidades que se generarían al realizar el trabajo de impulsar, fomentar y promover el patrimonio cultural a través de arte y la cultura.
Sin embargo, aún hay oportunidades para realizar proyectos artísticos, sólo hay que buscarlos y trabajar. 
Por ejemplo, en el transcurso del año se abren convocatorias para la realización de proyectos artísticos y la obtención de estímulos económicos de recursos públicos y privados, son pocas, cierto, aunque este año el Instituto de Cultura de Baja California (ICBC) repartió 33 estímulos en diversas categorías como jóvenes creadores, grupos, creadores con trayectoria, investigaciones del estado, para todas las disciplinas, pero se pueden obtener. 
También está la opción de procurar recursos privados, como el ejemplo mencionado, existen otros mecanismos para la adquisición de recursos, pero como mencioné, hay que prepararse, buscar y trabajar.
Artistas y académicos, cada uno desde sus trincheras, contribuyen con sus obras y propuestas artísticas a la generación de conocimiento, narración y registro de acontecimientos de momentos tanto individuales como sociales desde su experiencia, acciones y obras. 
La producción artística estimula las investigaciones, cuyos resultados podrían contribuir a la consolidación de puentes entre los seres humanos y un sector principal de sus propias producciones culturales.

Destacado: 
"Este año el Instituto de Cultura de Baja California (ICBC) repartió 33 estímulos en diversas categorías como jóvenes creadores, grupos, creadores con trayectoria, investigaciones del estado, para todas las disciplinas, pero se pueden obtener”. 

*Bailarina y maestra en Ciencias Físicas y Artes. 

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