Música para mis oídos

Por Miguel Nuñez*

La navidad pasada mi papá me pidió que lo ayudara a encontrar el nombre de una canción. La había escuchado en una película en los años setenta y desde aquel entonces se le había quedado grabada. Tras una búsqueda en Google, nos dimos cuenta de que se trataba de "Friends” de Elton John, que se usó como tema promocional para la película del mismo nombre.

¿Cuántas canciones se quedan con nosotros al terminar de ver una película? La primera vez que miré Asesinos por Naturaleza, todavía era un puberto. 

Me esperé a ver los créditos finales para tratar de inferir cuáles fueron esas canciones que me hicieron vibrar. Eran las de una voz grave que se imponía sobre los paisajes desérticos y los personajes violentos. 

Gracias a la tecnología de ese entonces, puse el VHS en pausa, escribí los nombres de las canciones y tras algunos rebobinados inferí que se trataban de "Waiting for the miracle” y "The future” de Leonard Cohen.

En aquella época, cada vez que salía de una tienda de conveniencia se me venía a la cabeza la música de la escena final de Pulp Fiction. Al abrir la puerta doble de la tienda, inmediatamente me conectaba con la escena en que Vincent (John Travolta) y Jules (Samuel L. Jackson) salen de un restaurante que acaba de ser asaltado. De forma instantánea "Surf Rider” de The Lively Ones comenzaba a sonar en mi imaginación. Esa es prueba del poder de la música en el cine.

Nuestra cultura popular tiene integrados los temas principales de Star Wars y de Tiburón, compuestos por John Williams. Por mi parte, aún encuentro fascinante la desgarradora música original de Requiem por un sueño, compuesta por Clint Mansell e interpretada por el cuarteto de cuerdas Kronos Quartet. 

Esta magnífica banda sonora nos sitúa justo en el punto de vista de los personajes. Nos lleva del delirio ocasionado por las drogas al dolor de una tragedia inminente.

El realizar la banda sonora de mi película Levantamuertos fue una experiencia enriquecedora. Por una parte, fue toda una odisea conseguir los derechos de las canciones de Los Buhos de Mexicali, La Migra y Los Plebeyos. Agrupaciones como estas marcaron una época y su música forma parte de la cultura popular del norte del país, por lo que ambientan perfectamente las escenas que toman lugar en el centro de la ciudad. Por otro lado, tuve la fortuna de contar con el apoyo de Ángel Vidales del grupo de rock Locomotora para tener una de sus canciones en los créditos de la película.

La música original de Levantamuertos estuvo a cargo de los compositores Dante Ojeda y Luis Felipe López. Al tener una película situada en Mexicali era importante contar con una banda sonora capaz de transmitir el sentir de la ciudad y de su gente. Por lo que se realizó música original en el género rock, que por un lado refleja el punto del protagonista y por otro ejemplifica cómo la calurosa ciudad trata con rudeza a sus habitantes.

Dante, Luis Felipe y Saulo Antillón grabaron la música original con guitarra, batería y bajo respectivamente. La grabación se realizó mientras se proyectaban las escenas de la película que le corresponden a cada canción. Fue un proceso en el que el "feeling” de cada pieza musical se iba trastocando al ser retroalimentadas por las imágenes.

Después de haber visto Levantamuertos infinidad de veces, me es casi imposible ver directamente a la pantalla cuando se está proyectando. Pero es muy reconfortante dirigir la mirada apenas por encima de la pantalla y escuchar con detenimiento su música y sus sonidos. Concuerdo con el director David Lynch, al decir que "las películas son 50 por ciento visuales y 50 por ciento sonido. Y que algunas veces el sonido supera a lo visual”.

Agregaría que mientras no estamos viendo, la música sigue con nosotros.

El soundtrack de Levantamuertos puede escucharse en:

*Cineasta de Mexicali.