Denuncia guardia un ataque armado

LUIS MIGUEL RAMÍREZ/EL VIGÍA
lramirez@elvigia.net | Ensenada, B. C.

Por el delito de lesiones calificadas, el ciudadano Samuel Ceja Ceja, de 58 años, denunció formalmente a quien resulte responsable, tras haber recibido un disparo con arma de fuego durante el pasado fin de semana, en un rancho de la delegación El Porvenir.

La puerta y el asiento de la unidad móvil que conducía el denunciante amortiguaron la velocidad del proyectil, ocasionándole solo daños materiales en el uniforme que llevaba puesto, así como una quemadura por roce del lado derecho de su espalda.

Aunque se trató una agresión realizada por una persona armada, y hubo una valoración en una institución médica, el hecho no tuvo seguimiento por parte de la Policía Ministerial del Estado (PME), motivo por el cual el afectado acudió ayer ante el Ministerio Público.

Eduardo Dávila Aguilera, asesor jurídico de la presunta víctima, dio a conocer que el incidente se suscitó cuando el adulto laboraba como empleado de seguridad privada en un restaurante del rancho Olivares, sitio que está en disputa legal bajo un clima de tensión entre los involucrados.

ALERTADO POR PROPIETARIO
Al prestar sus servicios de vigilancia durante la noche del 11 de mayo, el empleado de seguridad privada fue alertado por el propietario que un individuo se había introducido sin permiso a una zona restringida, por lo que acudió a sacarlo.

En la mañana siguiente, el sujeto regresó en un carro para esperar al guardia y dispararle. Posteriormente, el adulto agredido fue trasladado en una patrulla por agentes municipales, a las instalaciones del IMSS de la misma delegación.

Hasta el momento, no han respondido la empresa de seguridad para la que trabaja, el rancho ni las autoridades correspondientes, motivo por el cual Ceja Ceja teme por su integridad. Ha manifestado sufrir ataques de nervios.

Para finalizar, Dávila Aguilera hizo un llamado a la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE), a que atienda dicha situación, sobre todo porque no hubo apego al protocolo cuando se informó el ataque armado.