MUNDO DIGITAL

Espacios virtuales, una realidad

Una nueva realidad se hace presente para las personas en la actualidad, es importante equilibrarlas para ofrecer tiempo de calidad a los seres con quienes convivimos en espacios físicos
C&T
martes, 31 de julio de 2012 · 00:00
Ensenada, B.C. - En el Aeropuerto de Newark, Nueva Jersey en Estados Unidos, hay una área de comida rápida conocida como “food court” donde se aprecia todo tipo de gente. Un grupo de atletas preparatorianos regresa a casa, posiblemente después de haber participado en competencias en Nueva Jersey, conocido por su verdor como el estado de los jardines. Se aprecia también un hombre alto y de edad mayor cenando solo; lleva en la cabeza un turbante de la religión Sij. Unas mujeres compran café colombiano en un establecimiento “Juan Valdez”. Mucha gente cenando mientras esperan sus respectivos vuelos. Lo más llamativo tal vez, es una típica familia estadounidense sentada en un espacio para cuatro personas. Madre, padre y dos hijos varones de aproximadamente cuatro y seis años de edad. Ella platicaba con los niños, contestando sus preguntas, dándoles instrucciones, tratando de entretenerlos y en general conviviendo con ellos. La madre está sentada con un hijo por un lado y el otro enfrente. El padre está sentado a contra esquina de la madre. El padre está concentrado en un teléfono inteligente tipo iPhone. No participa en la conversación de la madre e hijos, no voltea a verlos, no interactúa con ellos. Éste encorvado en su silla con la mirada fija en su dispositivo móvil. Con los dedos lo opera, en ocasiones desplazándolos por la pantalla y en ocasiones moviéndolos como si tecleara mensajes. Cuando la madre e hijos requieren de su intervención, algo balbucea, pero no quita la mirada del aparato. La canción de Santa Sabina “Estando aquí no estoy” viene a la mente; el título de esta canción, la cual data de 1994, encaja perfectamente con el cuadro que se describe. El padre está físicamente con su familia, pero su concentración está en otro lado. Su entorno físico es el aeropuerto de Newark, cenando con su familia pero en realidad este hombre está en un espacio virtual a través de la conectividad que ofrece el Internet. Posiblemente esté “chateando” con otras personas en redes sociales o posiblemente trabajando contestando correspondencia electrónica. Mucha gente a esto le llama “multitasking” o multi-tareas, haciendo muchas cosas a la vez. La concentración humana permite que uno se enfoque en una cosa a la vez. Tareas sencillas que hasta cierto punto pueden automatizarse son ideales para hacerlas al mismo tiempo, como manejar y escuchar música por ejemplo. Pero otro tipo de tareas como contestar una llamada telefónica y escribir un correo electrónico al mismo tiempo, aunque es posible, no es ideal. Quien haya llevado a cabo una llamada telefónica con alguien quien al otro lado de la línea esté escribiendo un correo electrónico sabrá que la conversación no es de calidad, que hay pausas prolongadas. La realidad es que el padre de esta familia no estaba haciendo dos cosas a la vez, no estaba con su familia, estaba en otro entorno, estaba en una ambiente virtual. Esto es cada vez más común en estos días. En plena navidad adolecentes y adultos están conectados a través de sus computadoras, tabletas y teléfonos inteligentes a redes sociales mientras cenan con la familia, conviviendo más con sus contactos que con sus familiares. Balbuceando respuestas. Y es una pena que esto suceda. Tanto la convivencia con la familia como la convivencia con los amigos y contactos de las redes sociales necesitan la atención dedicada de las personas. Principalmente cuando se convive en espacios reales. Las redes sociales y la comunicación electrónica a través de los dispositivos móviles han cambiado como se trabaja hoy en el mundo de los negocios. Los empleados de grandes firmas trabajan más hoy que cuando no existía tanta conectividad, pues los correos electrónicos, mensajes de texto llegan a cualquier hora, están disponibles para su lectura inmediata y la tentación a contestarlos, aunque se esté fuera del horario de trabajo, es grande. Esto puede resultar de mucho beneficio para los empleadores pues aunque una persona este viajando, técnicamente no está fuera de contacto, técnicamente está accesible. En los aviones el servicio de Internet ya está disponible durante el viaje, el servicio es ofrecido por la mayoría de las líneas aéreas, lo que incrementa la presión de los empleados de trabajar y comunicarse durante los vuelos. Tiempo recreativo vs tiempo de trabajo La contraparte a esto es el acceso recreativo a las redes sociales dentro del horario del trabajo. En primera instancia ello tenía una connotación negativa desde la óptica de los empleadores y se reprendía a quien fuera sorprendido. Pero las empresas empiezan a ser mas permisibles y entienden el nuevo entorno social, de tal manera que ya hasta se promueve que los trabajadores lleven sus dispositivos personales al trabajo, e incluso que se conecten a las redes corporativas. En estas empresas la productividad se mide por metas alcanzadas dentro de ciertos periodos de tiempo y no se monitorea ni cuestiona a los empleados hasta que los tiempos se vencen. Esto permite que los empleados tengan flexibilidad de acceder a las redes sociales y realizar otras actividades personales durante el horario del trabajo y trabajar fuera de éste. Lo fácil es escribir y recomendar, pero lo difícil de hacer es balancear esta nueva realidad para poder ofrecer tiempo de calidad a los seres con quienes convivimos en espacios reales.

scastro@rocketmail.com

...

Valorar noticia

Comentarios