BUFADORA

Conforme se extinguen los plazos para que los partidos establezcan coaliciones y registren a sus precandidatos a los diferentes cargos de elección popular, los actores políticos comienzan a subir el volumen de sus posicionamientos, reclamos, deslindes y acusaciones, incluso los otrora aliados en el ámbito estatal y nacional fingen desconocerse y se tachan mutuamente de lo peor.

Y esta clase de actitudes es lo que desagrada a los ciudadanos, que el día de la jornada electoral del próximo año serán testigos de la forma en que se ponen más clavos en el ataúd de las ideologías, porque las alianzas entre partidos son para ganar votaciones, aunque las disfracen con la propuesta de construir un programa de gobierno democrático; y también se juntan para repartirse posiciones, algo así como una boda por conveniencia.

Baja California y Ensenada son regiones que las distintas fuerzas políticas utilizan como monedas de cambio, demarcaciones que el PAN y el PRI pueden ceder a sus satélites… perdón, partidos aliados, sin importar que varios de estos como el PES, PRD, PANAL y PT hayan sido sus acérrimos rivales y detractores en elecciones anteriores.

Si tal tendencia no cambia, muchos panistas y algunos priistas que radican en este municipio tendrán que apechugar y “sumarse” en favor de quienes postule su dirigencia… aja. Prueba de este sometimiento es que a diferencia de lo que se observaba en las décadas de los ochentas y noventas, hasta el momento ningún panista o priista ha manifestado abiertamente sus intenciones de contender a una diputación o senaduría. Todos(as) calladitos, esperando instrucciones. Qué pena.

El voto duro de los partidos denominados grandes se desplomó a partir de los comicios federales intermedios de 2015, y con esta clase de alianzas espurias terminarán por pulverizar a su base de militantes. Y por favor, ya dejen de echarle la culpa al futbol y las telenovelas, la gente no es tarada.

Cuchillito de palo
¿Qué pasó con la propuesta de eliminar el fondo de gestión social reciben mensualmente los regidores?

Mesa ciudadana
El senador panista por Baja California, el ensenadense Ernesto Ruffo Appel, propuso que agrupaciones ciudadanas integren una mesa para incidir en la elección del abanderado presidencial del Frente Ciudadano por México.

A través de una carta, el también aspirante presidencial consideró esencial que los ciudadanos se involucren en el método de selección de candidatos y en las elecciones mismas.

Planteó organizar debates, foros y exposiciones públicas para conocer los perfiles de los aspirantes.

“Que los distintos grupos ciudadanos organizados definan una mesa directiva nacional para que adquiera el reconocimiento de los partidos en el Frente y así participen en las actividades antes enunciadas”, sugiere el legislador.

El 13 de diciembre vence el plazo para que los partidos coaligados presenten el método para postular abanderado presidencial ante la autoridad electoral, o sea, restan sólo 10 días para que se haga todo lo que propone el también ex alcalde de Ensenada, lo cual suena bastante complicado.

Van 13 por Fepade
Fueron 13 las solicitudes que recibió la Comisión de Justicia del Senado de la República de igual número de aspirantes que se registraron para ser vigilantes en la elección del titular para la Fiscalía Especializada para la Atención de Delitos Electorales (Fepade).

Éstas fueron recibidas hasta el último minuto del pasado 29 de noviembre y enviadas vía correo electrónico o de forma presencial en dicha comisión.

Sin embargo, de éstos, serán eliminados siete, pues el Cuerpo Colegiado que acompañará a la comisión en el procedimiento de elección del titular de la Fepade, sólo estará integrado por seis personas.

La Comisión de Justicia informó que 13 fueron los que se registraron, pero será la Junta de Coordinación Política quien los elija, por lo que se espera que a más tardar la próxima semana el grupo esté constituido.

Entre los requisitos solicitados a los aspirantes se enlistan contar con el título de licenciado en Derecho, con una antigüedad mínima de 5 años; ser profesores o académicos; enviar una carta membretada en la que la institución a la que representan los avale y documentar que cuentan con conocimientos o trayectoria reconocida en el servicio público en materia penal o electora.

Sin revelar aún los perfiles de los postulantes, la senadora Pilar Ortega, presidenta de dicha comisión adelantó que dos son catedráticos de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y otro más de la Universidad de Guadalajara.