LA TURICATA

Nuestra confianza

José Carrillo Cedillo
martes, 16 de octubre de 2018 · 00:00

Voté por AMLO e incluso tuve la oportunidad de hablar con él los dos solos y le dije, entre otras cosas: Andrés no te voy a repetir lo que te han dicho miles de veces, sólo que voy a votar por ti, pero no nos falles…
A estas alturas de mi partido personal, ya no creo ni en la paz de los sepulcros, NO ME CHUPO EL DEDO, pero sentí sincero a Andrés Manuel. Fui maestro 42 años y lo que uno aprende, entre muchas cosas, es a leer los rostros. Así que seguiré criticando. Ya se aprobó la ley: ningún funcionario del gobierno podrá ganar un sueldo mayor al del presidente, que ganará 40 por ciento menos que el actual. Se acabaron los derroches y el lujo del que hacían gala los funcionarios públicos
Sin embargo, vimos el error de asistir a una boda de un allegado muy criticada por el derroche de todo y el pago de la portada de una revista muy nice.
¿No era lo que criticaba? No hay disculpa, debe haber coherencia.
Todos los votantes seremos rigurosos vigilantes.
Mi voto no me convierte en su incondicional, seguiré criticando y denunciando, porque en eso quedamos.
Ya no habrá  pensiones cuantiosas ni servidumbre, ni guardaespaldas a los ex presidentes…
Subrayo: VOTO IGUAL A JUSTICIA, cero tolerancias a la impunidad, no será cacería de brujas ni venganza; será justicia, así empezó su famoso discurso el asesinado Colosio: El PUEBLO TIENE HAMBRE Y SED DE JUSTICIA… Los muertos merecen honrar su memoria castigando a los culpables, sean quienes sean, la lista es larguísima, pero las denuncias ciudadanas ayudarán y tendremos que empezar por los actuales encargados de vigilar y hacer cumplir las leyes. Uno que otro juez. Que en el año de Hidalgo están excarcelando sin rubor a comprobados criminales, con argucias administrativas. Ya lo declaró AMLO, nadie por encima de la ley. TIENE QUE CUMPLIRLO. A la cárcel los agresores y asesinos de las mujeres y cárcel a los curas pederastas violadores de los niños. Las mujeres no cantan mal las rancheras, empezando por las perredistas Amalia y Rosario. Las excarcelaciones del actual gobierno tienen un tufo de pagar servicios o de tapar bocas peligrosas.
Hace mucho tiempo, por venganza, un político fue recluido en la cárcel por malversación de fondos y declaró: “yo me enlodo pero salpico”. Esto tiene una lectura obvia: sales libre, siempre y cuando te moches. En México hay un axioma iniciado por los priistas: “UN POLITICO POBRE, ES UN POBRE POLITICO”, de tal modo que entre más roben más impunes quedarán, pues todos ellos “salpican”.
En esta vida todo se sabe sin siquiera averiguar…
Confiemos,… sé que no está el horno para bollos, la burra no era arisca… la desconfianza se huele en el aire, se lee en los periódicos, faltan unas semanas, si no se detienen a tantos y tantas rateras la decepción será superlativa; NO QUEREMOS NI ACEPTAREMOS MÁS DE LO MISMO, por lo que habrá que vigilar que no huyan las ratas, la maestra ya renovó su pasaporte, la lectura de esto es obvia.
Que se voltee la tortilla… que los pobres coman pan y los ricos… etc. etc., cantaba el español Patxi Andión, hace muchos años. La moneda está en el aire. Confiemos…

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