ECONOMÍA Y POLÍTICA

Por favor, sin desgarrarse las vestiduras.

Por ¡Ah! Esa irracional costumbre ensenadense de, a priori, a todo decirle que no
martes, 10 de diciembre de 2019 · 00:00
Arcángel Rojo

Rolando Daniels Pinto
El 2 de julio de 2018, este espacio comentaba…. “dada la magnitud del problema que significa la exponencial generación de basura por el inevitable crecimiento poblacional y urbano, es prioridad encontrar nuevos esquemas para resolver de fondo dicho problema, (por lo que) se hace necesario encontrar un nuevo esquema operativo – financiero para mejorar ese servicio de recolección”.

Lo anterior tan sigue vigente, que el actual gobierno municipal ha decidido rentarle a una empresa seis camiones para complementar la deficitaria prestación de ese servicio, con el asombroso argumento – por verdadero – de pagar 600 pesos por tonelada recolectada, lo cual significa el 50% del costo actual de operación que resulta al gobierno municipal el recolectar la basura con personal y camiones propios.

El resultado de esta experiencia, de ser positivo, bien pudiera servir para – como se afirmó el 2 de julio de 2018 – diseñar “un modelo de negocio a través de las Asociaciones Público Privadas (APP), para crear una entidad responsable de recolectar la basura y que permita, mediante un eficiente esquema de reciclaje a partir de la separación de la basura por los usuarios, poderles repartir utilidades”.

Algunos se inconforman al percatarse de cómo un gobierno catalogado de progresista se atreve a tomar medidas concebidas como “privatizadoras” de un servicio público, algo supuestamente contrario a los intereses del pueblo; pero no, no es correcto estigmatizar la medida, porque si bien la Constitución Federal obliga al municipio a recolectar la basura, no le prohíbe poder contratar a alguien para ello.

A la gente le interesa que se le recoja regularmente la basura, no le importa cómo le haga el Gobierno Municipal para ello; sobre todo si no le cobra y si sus contribuciones se gastan eficientemente, lo cual es una obligación legal y ética de todo orden de gobierno. ¡Por favor, ya no se desgarren las vestiduras!

Por otra parte es innegable la suspicacia que este asunto ha generado, desde la forma en que se trató el asunto en el Comité de Adquisiciones, hasta el supuesto del tráfico de influencias y una deuda política, pasando por el problema del riesgo sanitario y la propuesta de adquirir con ese dinero nuevas unidades; ante ello el Alcalde niega los hechos y argumenta la legalidad del procedimiento y sus fundamentos.

El regidor Miguel Orea es quien más férrea y abierta oposición ha manifestado, pero con la falla de pretender acusar al Presidente Municipal con doña Vicenta Espinoza, la Secretaria de Honestidad y Función Pública del Gobierno Estatal, ya que ella no tiene jurisdicción en el asunto, pero además, quien acusa está obligado a probar, porque no se litiga en medios de comunicación y menos con grillas.

Más allá de la suspicacia y la presunta validez de los cuestionamientos, el outsourcing como forma de contratar la recolección parcial de la basura, ni es en sí misma ilegal, tampoco la estricta privatización del servicio y sí una opción viable ante la urgencia de satisfacer esa añeja necesidad de los ciudadanos.

Por otra parte, el regidor Raúl Vera propone la adquisición de nuevas unidades, algo que sin liquidez y sin mucha capacidad de crédito se percibe complejo, ello sin contar con los acendrados vicios dentro del sistema de limpia, los cuales son parte del problema en la deficiente recolección de basura. ¿Qué hace alguien que desea una casa y no tiene los medios para comprarla? Sólo le queda rentar una.

Lo que sí debe hacer de inmediato el gobierno municipal, es aplicar estrictamente el reglamento el cual obliga a la separación de la basura residencial y a las empresas a contratar por su cuenta un servicio para disponer de sus residuos sólidos. Por su parte, el dirigente sindical Jacinto Alcalá debiera entender que hoy ellos son parte del problema y así asumir la actitud de convertirse en parte de la solución.

La solución al problema de la recolección de basura es de largo plazo y pasa necesariamente por hacer cosas distintas, empezando con la propia gente quien debe aprender a hacerse responsable de su basura; la renta de los camiones puede ser el inicio de una solución más radical, que será tema de otra entrega.

rdanielspinto@hotmail.com

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