DE NIÑOS Y OTROS ENREDOS

Fiebre

Por La fiebre de la enfermedad la provoca el cuerpo propio. La del amor, el cuerpo del otro Hipócrates
jueves, 12 de diciembre de 2019 · 00:00

Dr. Enrique Sicardi Aragón*
Comúnmente también llamada calentura o hipertermia y llámese como se llame se le define al ascenso de la temperatura corporal por arriba de lo normal, y en cuestión de la misma, la normalidad no se modifica con la edad, desde prematuros hasta ancianos premortem, la temperatura normal es entre 36 y 37 grados centígrados, medio grado por arriba le llamamos febrícula y con 38 grados ya hablamos de fiebre, al igual que si un menor tiene 35 grados, hablamos de hipotermia, pero eso es otra historia.

La toma de la temperatura puede variar según el método usado. Han salido infinidad de artilugios, en especial electrónicos basado en lasser o luz infra-roja de mucha exactitud, pero aun, esos en manos pocos expertas, pueden dar lecturas erróneas. También los hay para mediciones dentro del oído, unos muy comunes y baratos son los electrónicos axilares u orales o rectales y por supuesto los más baratos y más precisos son los clásicos de mercurio, su problema es saber hacer la lectura, a lo que sugiero que cuando acudan a su médico lleve su termómetro y que el médico le oriente en la mejor manera de usarlo y leerlo. Los termómetros de frente, en lo personal, yo los desaconsejo.

La fiebre, calentura o hipertermia es un síndrome, o sea, un conjunto de signos y síntomas, el simple hecho de estar caliente, no significa que tiene SÍNDROME FEBRIL, para hablar de ello se tiene que acompañar de aceleración del pulso y la respiración, malestar general, ojos vidriosos, dolor de cabeza y otras molestias más que lo pueden acompañar.

El ascenso de la temperatura corporal es debido a un proceso inflamatorio desencadenado por múltiples causas, en niños, la causa más común es un proceso infeccioso, en el cual, entre el 80 y 90% de los casos se debe a un cuadro viral, aunque también pueden contribuir complicaciones bacterianas, mala hidratación, insolación u otros. Cualesquiera de esos, se nos manifestará como Síndrome febril agudo, el cual es una de las principales causas de consulta de primer contacto, tanto institucional como privada.

A muchas personas, en especial con poca experiencia, les alarma la manifestación de fiebre en el niño y de inmediato optan por auto-medicarlo. Los más populares en nuestro medio es el paracertamol (acetaminofén) y el ibuprofeno, ambos tienen sus riesgos así como sus beneficios. No es recomendable ante la menor sospecha de fiebre dar un antitérmico, la primer medida es constatar el nivel de fiebre, hidratarlo y refrescarlo, si la fiebre asciende, es conveniente el uso de algún fármaco pero por ningún motivo, ese debe darse ni con horario ni por días.

La fiebre es un mecanismo de defensa con el cual el sistema inmune produce anticuerpos, debe ser tratado como aliado y no como enemigo. La fiebre nos informa cómo va el proceso de la enfermedad.

Una fiebre aguda, en lo personal no me alarma. El reposo, dieta y buenos cuidados, en un niño sano, inmunocompetente, pasará como llegó, sin embargo, en niños inmunodeprimidos, en ellos los conceptos cambian y la vigilancia debe ser estrecha.

Lo más normal del mundo en los niños es pasar con frecuentes procesos febriles, muchos padres se alarman por la recurrencia, pero si ese chico, continúa con buen crecimiento, buen apetito, activo y reactivo, lo más probable es que no tenga nada de fondo, pero si la fiebre se llegara a prolongar más de 3 a 5 días continuos acompañado del deterioro del estado general, será menester estudiar otras causas infecciosas, poco comunes.

Existen otras causas poco comunes de fiebre, en especial, prolongadas por más de 10 a 15 días de fiebre cotidiana y no es nada raro que dichos pacientes hayan recurrido a dos o más médicos y con diversidad de antitérmicos, antibióticos y otros tantos fármacos; desgraciadamente existen procesos inflamatorios como el cáncer y enfermedades autoinmunes que comúnmente su primera manifestación puede ser fiebre de difícil explicación, obvio es que dichos pacientes, ante un buen interrogatorio y exploración, aflorarán otros datos dignos de orientar al proceso que ocasiona el o los síntomas.

Mis amigos, afortunadamente la casi totalidad de la causa de la fiebre en los niños son procesos virales que aquejan a niños inmuno-competentes, los cuales, con buenos cuidados, serán auto-limitados. Nos preocupan aquellos niños desnutridos, maltratados, descuidados o inmunodeprimidos, pero más preocupación nos dan aquellos padres poco comprometidos y negligentes.

*Coordinador de Relaciones Públicas del Consejo Nacional de Lactancia Materna A. C.

sicardi53@gmail.com
 

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