AJEDREZ PÚBLICO
El último tango de París
Por Alfonso Torres Chávez*
En las últimas décadas México ha sufrido la mayor revolución constitucional de su historia. No se concibe ya el orden jurídico sin la presencia permanente de los derechos humanos.
Desde la reforma constitucional de 2011 ésta ha impactado en todas las esferas del país.
Si uno visita con frecuencia la página de internet de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, se puede tener acceso a archivos en formato PDF que brindan las versiones públicas de las resoluciones de nuestro máximo tribunal constitucional.
En América Latina todos los tribunales que se han digitalizado con sus sitios web brindan versiones públicas de sus resoluciones.
Evidentemente esto tiene un trasfondo jurídico. Es decir, el derecho fundamental de acceso a la información se puede colmar de forma eficiente dando a acceso a dicha información.
¿Qué contienen esas resoluciones? Es información que no se considera confidencial, es decir que puede ser difundida sin provocar problema alguno a las partes involucradas en un litigio o asunto que es de conocimiento de la Corte.
Obviamente hay ciertas omisiones en la información, cuando estamos hablando de datos sensibles o que pudieran poner en peligro a las personas.
Lo que resaltan estas resoluciones es sencillamente, la información básica, es decir resaltan los derechos humanos que se vulneraron y los que se protegen a través de la sentencia.
Incluso con letras muy oscuras se da relevancia los encabezados de manera tal que pueden encontrarse con facilitad los conceptos de violación –si es apelación o amparo- y se resalta todo un análisis iusfilosófico de los conceptos fundamentales de la sentencia en comento.
Pueden encontrarse proyectos de todos los ministros y de las dos salas que componen la Corte, así como proyectos emitidos por el pleno.
Toda esa información se volvió accesible a través de las casas de la cultura jurídica y de la modernización digital del sitio de internet de la corte.
Es por ello que es de fácil acceso e incluso se puede descargar para conservar el archivo digital.
Así esa información es de utilidad a la población, así como a profesores, abogados, investigadores y quienes estamos involucrados en los ámbitos de la justicia y el derecho.
La libertad de información ha vuelto a la corte un órgano abierto al servicio de la sociedad.
*Docente en la Lic. en Derecho en Universidad Vizcaya de las Américas
alfonsotorr@gmail.com
Desde la reforma constitucional de 2011 ésta ha impactado en todas las esferas del país.
Si uno visita con frecuencia la página de internet de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, se puede tener acceso a archivos en formato PDF que brindan las versiones públicas de las resoluciones de nuestro máximo tribunal constitucional.
En América Latina todos los tribunales que se han digitalizado con sus sitios web brindan versiones públicas de sus resoluciones.
Evidentemente esto tiene un trasfondo jurídico. Es decir, el derecho fundamental de acceso a la información se puede colmar de forma eficiente dando a acceso a dicha información.
¿Qué contienen esas resoluciones? Es información que no se considera confidencial, es decir que puede ser difundida sin provocar problema alguno a las partes involucradas en un litigio o asunto que es de conocimiento de la Corte.
Obviamente hay ciertas omisiones en la información, cuando estamos hablando de datos sensibles o que pudieran poner en peligro a las personas.
Lo que resaltan estas resoluciones es sencillamente, la información básica, es decir resaltan los derechos humanos que se vulneraron y los que se protegen a través de la sentencia.
Incluso con letras muy oscuras se da relevancia los encabezados de manera tal que pueden encontrarse con facilitad los conceptos de violación –si es apelación o amparo- y se resalta todo un análisis iusfilosófico de los conceptos fundamentales de la sentencia en comento.
Pueden encontrarse proyectos de todos los ministros y de las dos salas que componen la Corte, así como proyectos emitidos por el pleno.
Toda esa información se volvió accesible a través de las casas de la cultura jurídica y de la modernización digital del sitio de internet de la corte.
Es por ello que es de fácil acceso e incluso se puede descargar para conservar el archivo digital.
Así esa información es de utilidad a la población, así como a profesores, abogados, investigadores y quienes estamos involucrados en los ámbitos de la justicia y el derecho.
La libertad de información ha vuelto a la corte un órgano abierto al servicio de la sociedad.
*Docente en la Lic. en Derecho en Universidad Vizcaya de las Américas
alfonsotorr@gmail.com
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