LA BRÚJULA

Manuel Arturo Meillón García: director del Archivo Histórico de Ensenada

Por Heberto J. Peterson Legrand
lunes, 14 de septiembre de 2020 · 00:00

Arturo Meillón García, nació en la ciudad capital de Mexicali, siendo sus padres don Manuel Meillón Chávez y Doña Rosa García Macías.

En su ciudad natal cursó la licenciatura en Ciencias de la Comunicación por la UABC.

Su relación con Ensenada es muy estrecha, la mayoría de sus vacaciones desde la infancia han sido aquí, donde tiene una numerosa familia y desde hace 10 años ha hecho su vida familiar en esta ciudad.

Durante su paso por la universidad trabajó en Actividades Culturales de la UABC y en Tecnología Audiovisual. En el canal de la misma universidad laboró en la producción de un noticiero cultural y en una serie documental sobre la historia de Baja California. Fue su profesión y experiencia en fotografía y galerías lo que lo llevó a ser parte del Archivo Histórico de B.C., llamado por la entonces jefa del departamento; la talentosa Susana Phelts Ramos, quien pronto dejaría el mando de ese archivo para cursar una maestría en España, quedando nuestro entrevistado al frente del mismo durante aproximadamente 10 años, donde realizó un magnífico papel.

¿Cómo llegaste al Archivo Histórico de Ensenada y cuál fue el trayecto para su recuperación?

Cuando salí del Archivo estatal ya tenía mi familia en Ensenada, por lo que la opción natural era buscar suerte aquí. En aquel momento, Mario Lamadrid García era director del Imcudhe y buscaba reactivar el Archivo Histórico que había venido mucho a menos. Fue entonces que me invitó a unirme.

Recuerdo que siendo jefe del archivo estatal vine en 2007 a la inauguración invitado por usted siendo el director fundador. Era un pequeño, pero muy bonito y ordenado archivo. Por fin Ensenada, la ciudad más antigua de Baja California contaba con un archivo histórico. Cuando llegué en 2014 no sé qué había pasado. Aquel archivo se había convertido en una lúgubre bodega de documentos. El área de consulta estaba invadida con cajas de libros, revistas fotografías y expedientes, entre otros muchos problemas. El lugar sólo funcionaba para la consulta del periódico del día.

Mario Lamadrid, desde la dirección de cultura fue un buen aliado del archivo. Empezamos a solucionar algunos problemas pero pronto fue llamado para hacerse cargo del Centro Cultural Riviera.

Entonces vinieron tiempos difíciles y los problemas se agravaron. Entraron aguas de las lluvias al edificio, afectando documentos y fotografías.

De alguna manera logramos reacondicionar una parte del área para consulta y se realizaron exposiciones en diversos espacios.

Al inicio de la anterior administración municipal escuché al entonces nuevo regidor Cristian Vázquez afirmar que apoyaría a las bibliotecas, por lo que lo abordé en un evento y lo invite al archivo. En un par de días ya estaba allí escuchando las necesidades y conociendo la importancia del lugar. En ese momento me ofreció recursos para subsanar las necesidades más apremiantes que yo consideraba eran el techo y la rehabilitación como repositorio de un local aledaño.

Los trabajos se llevaron a cabo y se aplicó una losa de concreto en el techo y se acondicionó un local en ruinas como una primera fase de repositorio.

El proyecto incluye un segundo nivel en ese repositorio que duplicaría esa área. También era necesario rehabilitar otros dos locales aledaños -hacía la calle Gastélum- pero el recurso no era suficiente para estos fines. Es un proyecto pendiente y muy necesario. De esta manera podríamos contar con un archivo funcional para varios años.

Durante la administración de Octavio Gutiérrez en el Imcudhe se le dio atención al archivo, escuchaba los proyectos y necesidades y con muy pocos recursos trataba de subsanarlos. Entre otras cosas, se habilitó el archivo con mesas, sillas, computadoras, mobiliario para la biblioteca y se reparó y pintó el interior.

Actualmente, a pesar de la falta de recursos derivada, al parecer por el mal uso de éstos por anteriores administraciones y agravada por la actual situación de confinamiento provocado por la pandemia que estamos viviendo, tenemos la suerte de contar con un director de cultura con la sensibilidad para dar atención especial al archivo y al patrimonio cultural. El ingeniero Alfredo Cañas ha estado muy al pendiente inclusive desde antes de asumir el cargo, está en constante comunicación y resulta evidente que es un tema que le apasiona. Bajo su dirección la vida del archivo se reactivó, pero como es bien sabido, entramos en una pausa internacional involuntaria de la que esperamos salir muy pronto.

¿Cuál es el futuro del Archivo Histórico de Ensenada?

A corto plazo, continuar acopiando, resguardando, organizando y conservando la memoria histórica que nos da un sentido de pertenencia e identidad a los ensenadenses. Continuar ofreciendo un lugar en el que los investigadores, estudiantes y el público en general pueda acudir a realizar sus investigaciones, y promover la canalización al archivo de documentos generados por la administración pública que han perdido su valor primario pero conservan un valor testimonial.

Por otro lado, estamos a la espera de la Ley Estatal de Archivos, que ya está desfasada, el plazo para su publicación era junio de este año. El Estado está obligado a la publicación de una ley que armonice con la nueva Ley General de Archivos y esa ley dictará los lineamientos a seguir en materia de administración documental en los archivos municipales.
 

...

Comentarios