Sigue el pleito Bonilla-Delgado

Por lo visto, sigue el pleito entre el exgobernador Jaime Bonilla Valdez, y el dirigente nacional de Morena, Mario Delgado Carrillo, y todo hace indicar que está por todo lo alto.

Sin dar muchos detalles al respecto, en su momento el Ex Ejecutivo Estatal reveló que algunos de los “golpes” que su gobierno estaba recibiendo, disfrazados de decisiones de funcionarios federales, eran acciones promovidas por Delgado Carrillo, del que -además- se sabe que no lleva la mejor de las relaciones con el presidente de la república Andrés Manuel López Obrador.

Tras concluir el período de Bonilla pareciera que este enfrentamiento se habría enfriado, sin embargo, eso no ha sido así, sobre todo, por los últimos acontecimientos que se registraron la tarde de ayer, pero ahora dentro del partido.

A César Castro Ponce, un joven cercano a Jaime Bonilla, se le restituyó como presidente estatal de Morena, cargo que le había sido regateado por la dirigencia nacional, no obstante, la decisión de la Comisión Nacional de Honestidad y Justicia, que en abril de este año determinó, que había sido legal su elección como presidente.

En ese entonces se estableció que la convocatoria y la sesión extraordinaria que celebró el Consejo Estatal de Morena en Baja California, en septiembre de 2020, habría sido válida, no obstante que militantes opositores al entonces gobernador, lo acusaron de haber maniobrado para lograr ese resultado, pese a que la mayor parte de los consejeros asistentes votó a favor de Castro Ponce, quien es uno de los fundadores del partido.

Sin tomar en cuenta esa decisión, Ismael Burgueño impugnó, y aunque el Tribunal Electoral confirmó a Castro Ponce, siguió “moviéndose” en la Ciudad de México, inclusive cuando la Comisión de Honor y Justicia, también falló a favor del ahora presidente.

Hacía declaraciones y actuaba como dirigente Estatal, primero, de manera muy discreta, mientras Jaime Bonilla seguía en el poder, y después, (cuando ese gobierno concluyó), de manera abierta y pública, sin explicar el porqué de esta decisión.

Burgueño, en esa calidad se presentó en audiencia con la nueva gobernadora Marina del Pilar Ávila Olmeda, y encabezó diversas reuniones con funcionarios electos de este partido; con los liderazgos y militantes.

Hasta que hoy trascendió que se había reconocido el nombramiento de Castro Ponce, como el verdadero presidente de ese partido.

Para el efecto, le fue entregado el nombramiento oficial que, de manera lacónica, le reponía en su cargo.

Textual, el documento firmado por Delgado Carrillo -con fecha 8 de noviembre de 2021, y en papel membretado- señala:

Por este conducto le comunico que el día 8 de noviembre de 2021 durante la XXVIII sesión urgente del Comité Ejecutivo Nacional de nuestro partido, y con fundamento en el párrafo tercero del Artículo 38 de nuestro Estatuto, este Órgano Ejecutivo tuvo a bien acordar la RATIFICACIÓN de su nombramiento, como presidente del Comité Ejecutivo Estatal de Baja California.

El presente nombramiento tendrá efecto, a partir del día 8 de noviembre de 2021, reza por último.

Y no sabemos si a “regañadientes” el dirigente nacional aceptó tomarse la fotografía con César Castro, pero inmediatamente después de publicado, que había sido “tumbado” del cargo que ostentaba, Ismael Burgueño “subió” otra fotografía en sus redes, en la que aparece acompañado, también, de Mario Delgado.

Junto con la gráfica, Burgueño anunció que, a partir de este día, estaba asumiendo el cargo de Delegado Político del Comité Ejecutivo Nacional de Morena, en Baja California.

Aprovechó para felicitar a Castro Ponce por asumir la dirigencia estatal del partido, y dijo seguir sosteniendo que, para mantener la estabilidad política del Estado, se requiere del diálogo y entendimiento permanente entre los diferentes actores políticos, y la participación de las nuevas generaciones

Ofreció seguir “construyendo” esa actitud “de la mano con la militancia”.

También aseguró que no habrá de “claudicar” en el trabajo de coordinación, de apoyo, y acompañamiento del CEN de Morena, en las políticas públicas de los diferentes niveles de gobierno, para darle continuidad a la “cuarta transformación” en Baja California.

Pero esos son las palabras y los discursos, porque tras de esto, lo que se observa es que Jaime Bonilla logró “desatorar” en Morena el tema de la dirigencia estatal, por lo que tal vez -no muy contento- pareciera que Mario Delgado que sí aceptó finalmente, el nombramiento de César Castro, pero se sacó otra “carta bajo la manga”, y colocó a Burgueño como delegado político.

Y aunque normalmente, es el dirigente Estatal el que toma las decisiones (en tanto que el delegado político está buscando cómo intervenir), veremos de “qué cuero salen más correas”.

A menos de que ya hubiesen llegado a un acuerdo, y como aquella historia del Rey Salomón, decidieron dividir las cosas.

ANA Y CONDA
Amar no es un delito, porque hasta Dios amó: Santiago Nieto.

PD. - Bueno... en el caso de Santiago Nieto, es un meme el que circula al respecto, pero dice: si amar es un delito, me declaro culpable.

PD1.- El gobernador Jaime Bonilla parece que sigue disfrutando con mantener en ascuas a los interesados (ya sea por curiosidad, o por ser opositores) sobre lo que será su futuro político.

PD2. Hoy reapareció en sus redes -como civil- y subió un agradecimiento, así como una fotografía, con la leyenda que advierte que es un empresario bajacaliforniano, lo que de inmediato provocó especulaciones, en el sentido de que se quedaría dentro de su empresa.

PD3 - Sin embargo, hasta donde sabemos, esta no es su respuesta sobre los ofrecimientos que ha tenido, de parte del presidente de la república.

PD4.- Bonilla, siempre ha asegurado que cumple con su palabra, y él ofreció dar una respuesta el próximo día 15, así que esperamos.

PD5.- Como puede ser una cosa, puede ser otra, diría La Chimoltrufia.

afntijuana@hotmail.es