AFN POLÍTICO

Le retiran escoltas al oficial mayor de Tijuana

Por: Dora Elena Cortés
lunes, 8 de noviembre de 2021 · 00:01

En verdad que me está sorprendiendo (hasta ahorita) la presidenta municipal de Tijuana Monserrat Caballero Ramírez.

Y es que en lugar de reaccionar de manera visceral por los señalamientos que se hacen, ni tratar de ver “moros con tranchete” (enemigos, pues) dentro de la prensa, actuó como se espera de una gobernante.

En la semana que terminó, publicamos -primero- un comentario señalando el hecho de que el oficial mayor de su gobierno, Marcelo de Jesús Machaín se estaba dejando ver por todas partes, y en su función cotidiana, protegido por escoltas, cuando su función, en realidad no lo amerita.

Luego publicamos la fotografía en la que no quedaba duda que, aprovechando su puesto, y tal vez su muy cercana amistad con la munícipe, traía para su cuidado y “protección” al menos dos escoltas.

Y por lo que pudimos saber -a reserva de confirmarlo- es que ya le fueron retirados esos elementos de seguridad al funcionario -de primer nivel- por órdenes de la propia presidenta municipal.

Y es que esa actitud adoptada por el funcionario se contraponía al discurso y ofrecimientos de la alcaldesa, quien ha estado hablando de la necesidad de mejorar la seguridad en Tijuana, y no sólo eso, sino de la también urgente necesidad de recuperar a los elementos policiacos que estaban haciendo funciones de escoltas, en seguridad privada, hacia ciertos personajes mientras que esos elementos le estaban faltando a la ciudad.

Así es que no resultaba congruente, que mientras -por una parte- se ordenaba la concentración de sus agentes en actividades de seguridad pública, por la otra, por simple “glamour” algunos funcionarios se hicieran de este tipo de protección personal, por considerar que eso les brinda estatus.

Siempre ha ocurrido, y más cuando inicia un gobierno, que no faltan aquellos que con tal de presumir ante la ciudadanía, presionan por la asignación de escoltas que los lleven y los traigan y que les apoyen en sus necesidades diarias.

No está a discusión que el presidente municipal tenga esa protección y vigilancia, y también el secretario de Seguridad Pública, así como el director de policía, pero de ahí en más, todo es protagonismo y deseos de hacer “show”.

En la administración pasada, la entonces síndico María del Carmen Espinosa, argumentando supuestos riesgos por las también presumibles investigaciones que estarían haciendo y que en realidad no concluyó ninguna de alto nivel, ni mucho menos de peligrosidad, logró rodearse de una “nube” de agentes que la siguieron por todas partes, y cuando le fueron retirados una mayoría, recurrió a instancias legales arguyendo “violencia de género” para poder continuar con esos elementos, y lo logró.

Mucho avanzaríamos si los nuevos funcionarios, cuando inician sus actividades dentro de los gobiernos, entendieran que los elementos policiacos que pagamos con nuestros impuestos, no son para traerlos como asistentes o secretarios privados, abriendo las puertas, o comprando la leche para sus niños, y acompañándolos a sus actividades públicas y privadas, bajo un supuesto riesgo.

Por eso, digan lo que digan, reconocemos esta decisión de la presidenta municipal (de ser como parece) que le retiró los escoltas a Machaín.

La prisa de Monreal por convencer a Bonilla
Otro que parece desesperado por “meter al carril” al exgobernador de Baja California, es el presidente de la Junta de Coordinación Política (JUCOPO) del Senado de la República, Ricardo Monreal Ávila, quien por cierto fue uno de los que asistieron a la toma de posesión de la hoy nueva gobernadora del Estado, y es que Milenio -en su edición digital del pasado 2 de noviembre- publicó una entrevista con el senador, que ya recientemente habría anunciado que Jaime Bonilla podría regresar a la Cámara Alta donde le tienen guardado su escaño, pero ahora, en su declaración a Milenio, Monreal afirmó que estaba haciendo “lo posible” porque Bonilla sí regresara al Senado, argumentando que esperaba que la transición -que ya se dio en Baja California- fuera “de terciopelo y no de pica hielo”.

Aseguró que el exmandatario Estatal debe entender que su tiempo “ya pasó” y que ejerció el poder, por lo que ahora debe dejar a la nueva gobernadora hacer lo propio, sin embargo, lo que llama la atención, es esa urgencia que ha manifestado Monreal por obligar a Bonilla a que ya acepte públicamente que regresará al lugar que le ha estado “cuidando” el ensenadense Marco Antonio Novelo Osuna.

Y es que, no obstante, la intención de Monreal de garantizar a Marina del Pilar un gobierno sin sobresaltos, ni tropiezos ni presiones, tal parece que quisiera tener la seguridad, del sitio que Bonilla podría ocupar, si decide seguir en la vida pública.

Y eso pareciera que trae “nerviosos” a algunos, entre estos a Monreal.

¿No será que piensa que el presidente los está preparando para que sea una de sus corcholatas?

Por cierto... No creo que el término les guste a los destinatarios.

ANA Y CONDA
Me está convenciendo la 4T. Las bodas en Antigua, deben ser espectaculares.

PD1.- Y qué tal don Santiago Nieto, titular de la Unidad de Investigación Financiera de la Secretaría de Hacienda, celebrando su boda en Guatemala.

PD2.- Y “santo escándalo” el que se generó, por los 35,000 dólares que fueron encontrados en la bolsa de una de las pasajeras, en el avión privado en que viajaban y que ya provocó la “caída” de la secretaria de Turismo de la Ciudad de México, Paola Félix Díaz.

PD3.- Qué feo levantarse una mañana, toda linda y toda feliz, para viajar al extranjero, a una boda “fifí”, y regresar sin cargo, después de varias horas de arresto, y tal vez sin asistir a la “famosa boda”.

afntijuana@hotmail.es

 

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