Mujeres y niñas en la ciencia

Desde hace muchos años trabajo a lado de científicas que se dedican a la Astronomía, mujeres exitosas, disciplinadas, haciendo ciencia de alto nivel, mujeres de carne y hueso, mujeres madres, hijas, amigas, parejas, mujeres que les gusta bailar, cantar, hacer ejercicio, cocinar, mujeres con preocupaciones, mujeres que luchan con otras para buscar la igualdad de género, que dedican tiempo a la divulgación de la ciencia y animar a otras mujeres a hacer ciencia.

Dentro de la ciencia, hay otras mujeres profesionales que trabajamos para lograr que la ciencia se desarrolle y es el caso de las ingenieras en cómputo, bibliotecarias, instrumentistas, comunicadoras, ingenieras civiles, administradoras, ayudantes de limpieza, cocineras, quienes también formamos parte de esta comunidad que trabajamos diariamente junto a las mujeres científicas, haciendo una sonoridad entre nosotras y uniéndonos para lograr desde nuestra trinchera la igualdad de género y ser portadoras de voz para que otras mujeres sigan por el camino profesional que sueñen.

Es el 11 de febrero que se celebra el Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia, establecido por la Asamblea General de la ONU en el 2015 cuyo objetivo es “crear conciencia sobre el tema que celebra la excelencia de la mujer en la ciencia y recordar a la comunidad internacional que la ciencia y la igualdad de género deben avanzar de la mano para abordar los principales desafíos globales y lograr todos los objetivos y metas de la Agenda 2030”.

Este día especial promueve y reconoce el papel de las mujeres y las niñas en la ciencia. Actualmente solo el 33% de los investigadores en el mundo son mujeres. A nivel mundial, la matrícula de estudiantes mujeres en el campo de la tecnología de la información y las comunicaciones (TIC) es de tan solo 3%; en las áreas de ciencias naturales, matemáticas y estadísticas, 5%; y en ingeniería, manufactura y construcción, solo el 8 % de los estudiantes son mujeres.

La brecha de género es evidente en todos los ámbitos, particularmente en la participación de las mujeres en la generación de conocimiento científico, sigue siendo una tarea pendiente. En México, el 12% se gradúan de alguna carrera STEM (por sus siglas en inglés: science, technology, engineering and mathematics).

En estudios recientes se advierte que hay falta de visibilidad de las mujeres que se dedican a la ciencia, la poca orientación vocacional, los estereotipos y la influencia familiar son factores que influyen en la decisión de escoger una carrera científica o STEM, se requiere una narrativa diferente donde se cuenten las historias de estas mujeres y al hacerlas visibles buscar reducir la brecha de género en esta área tan importante del conocimiento. La visión de las mujeres es muy importante en la resolución de problemas mundiales.

En su reporte 2020 sobre la brecha de género, el Foro Económico Mundial estima que, de seguir con esta poca participación, el mundo tardaría 99 años en cerrar la brecha. México se enfrenta a un reto importante debido a que solo el 47% de las mujeres del país forman la fuerza laboral, ocupando el lugar 124 de 153 países.

*Instituto de Astronomía UNAM