BUFADORA

El gobernador, Jaime Bonilla Valdez, anunció el sábado pasado en Mexicali, que el presidente de la república, Andrés Manuel López Obrador, realizaría otra gira de trabajo por Baja California en los próximos días, con el propósito de visitar el Valle de San Quintín, donde supervisará la obra de ampliación de una clínica-hospital del IMSS, unidad médica que por cierto recorrió a finales de noviembre del año pasado, y que se supone regresaría a inaugurar, pero como los trabajos todavía no concluyen sólo constatará los avances.

Sin embargo, tal y como sucedió en aquella ocasión, se espera que el primer mandatario de la nación sea recibido en medio de varias protestas, sobre todo por parte de los pescadores de la zona de El Rosario que eran seguidores del controvertido activista Diego Antonio Jiménez Aguilar, quien además de haber sido su dirigente, también era secretario general del Partido Encuentro Social (PES) en la entidad, pero que fue asesinado en el poblado de Maneadero el 3 de noviembre de 2020, apenas tres semanas antes de que estuviera López Obrador en San Quintín.

Y como aún no se esclarece su homicidio, es seguro que volverán a manifestarse sus simpatizantes.

Además, los involucrados en las campañas políticas, en especial los que pertenecen a la oposición, tampoco van a desaprovechar la presencia del presidente del país, para exigirle –con sobrada razón- una estrategia de seguridad más eficaz en esta frontera, donde el número de ejecuciones y la salvaje forma en que se cometen ha generado mucho temor en la población.

Y como problemas y rezagos hay bastantes, los cuales se magnifican en tiempos electorales, hasta los representantes de los grupos de jornaleros agrícolas migrantes pueden animarse a realizar movilizaciones antes y durante la visita presidencial.

Así que desde ahora se advierte que será mayor la estridencia de los reclamos, que obviamente llevarán dedicatoria para el gobernador Bonilla Valdez y el alcalde de Ensenada, Armando Ayala Robles, aunque el primero seguramente responderá a los señalamientos en sus habituales transmisiones mañaneras.

Sólo uno de seis
A unos cuantos días de que concluya el plazo para reunir el número de firmas de apoyo para poder registrarse como candidato independiente a las presidencias municipales de Baja California, de los seis aspirantes sin partido a la alcaldía de Ensenada, todo parece indicar que únicamente Rogelio Castro Segovia logrará postularse por segunda ocasión consecutiva, porque los otros cinco interesados no han logrado conseguir ni el 50 por ciento de las 10 mil 154 firmas requeridas.

Al respecto, Castro Segovia ya obtuvo más de 10 mil respaldos ciudadanos, no así Jesús Alcántara Martínez, quien lleva un avance del 42 por ciento; Guadalupe Hernández Valdez (36%); Ernesto García González (34%); Sanciro Ríos Zúñiga (3.81%); y José Alonso Ramírez Ramírez (3.23%)

El plazo vencía este 12 de febrero, pero algunos de ellos pidieron una ampliación, que se otorgó para el 20 y en otros al 22 de febrero.

En cuanto a los aspirantes independientes a las diputaciones locales, el activista Ramiro Orea Hernández, quien busca ser el representante del Distrito XVII, ya tiene más de las 3 mil 827 firmas que establecieron las autoridades electorales, al igual que José Antonio Muñoz Márquez por el Distrito XVI, quien ya rebasó el umbral que fijaron para esa demarcación, que son 4 mil 124.

Pocas dósis
Mientras el secretario de Salud de Baja California, el doctor Alonso Pérez Rico, reconoce que las vacunas contra Covid-19 que llegarán a la entidad apenas representan el 38.6 por ciento del total de población mayor de 60 años que ya manifestó su deseo porque le apliquen la dosis, porque la federación sólo entregará al estado un paquete de 23 mil 810 mil vacunas de AstraZeneca, de las 870 mil que arribaron al país.

Con base en el censo de la propia Secretaría de Salud, en Baja California residen 372 mil adultos mayores, pero sólo 59 mil 488 han manifestado su deseo de ser inmunizados, en tanto, otros tienen condiciones de salud que les impedirán vacunarse y hay quienes temen al biológico, precisó Pérez Rico.

“Quiero ser muy claro, las 23 mil dosis que nos van a llegar no nos van a alcanzar para el 100 por ciento de los adultos mayores y derivado de eso tenemos que ser muy puntuales sobre a quién vacunamos primero, el objetivo número uno es reducir las muertes”, afirmó.

Y como parte de la política nacional, aquí se enfocará en 45 puntos de zonas rurales, como San Quintín, el Valle de Mexicali y San Felipe, priorizando la edad, comorbilidades y necesidades de control epidémico en la región.

“De ahí, de la periferia, nos iremos a atender las áreas suburbanas, y al final las áreas urbanas”, precisó el funcionario.

Estela de muerte
No sólo la pandemia del Covid-19 causa un profundo dolor en la sociedad por el elevado número de fallecimientos, sobre todo en una comunidad relativamente pequeña como la de Ensenada, donde la violencia generada por la delincuencia organizada también sigue imparable, al grado que ayer arrojaron a un costado de la carretera de la Ruta del Vino los cuerpos de tres hombres ejecutados.

Pandemia, inseguridad y desempleo. No pintan bien las cosas.