DESDE EL VIGÍA

Luz al final del túnel

Por Editorial El Vigía
miércoles, 17 de febrero de 2021 · 01:10
Hemos superado la catastrófica cifra de 2 millones de personas infectadas por el Covid-19, se han recuperado 1 millón 560 mil y lamentablemente han fallecido 175 mil, según registros oficiales.

En Baja California los casos confirmados son 42 mil 41; 31 mil 566 pacientes los recuperados; mil 575, sospechosos; y, 7 mil 93 fallecidos.

En Ensenada hay confirmados 6 mil 373, de los cuales 4 mil 661 se han recuperado, pero tenemos 422 sospechosos, y desgraciadamente ayer superamos la temida barrera de los mil casos más 101 activos en los diferentes hospitales de la ciudad.

En San Quintín los confirmados son mil 780; mil 454 recuperados, 68 sospechosos, 82 fallecimientos y 37 casos activos.

La pesadilla ha sido muy larga y angustiante para todos, pero más para quienes han tenido el infortunio de tener en su familia uno o más contagiados, por las implicaciones de la enfermedad en sí misma, pero también por la falta de medicamentos y espacios en los hospitales, en algunos momentos de la pandemia.

Afortunadamente ayer el secretario de salud informó que los casos activos de Covid-19 se redujeron a 637 en la entidad.

Confirmó que el Estado permanecerá en semáforo Naranja y pidió a todos no relajar las medidas sanitarias para que en un futuro cercano puedan incrementarse los porcentajes de aforos en los distintos giros.

Mencionó que 9 personas contagiadas de Covid-19 fallecieron en las últimas 24 horas, mientras que 87 casos nuevos fueron confirmados en el mismo período.

El funcionario refirió que sigue siendo de 20.6 el promedio de muertes por día; dijo que la ocupación en los hospitales Covid-19 en la entidad es de 27%, donde hay 83 personas intubadas y 198 ventiladores disponibles.

Buenas noticias no son, la situación sigue siendo muy complicada, pero el solo hecho de que se haya detenido la ola de contagios luego de las fiestas de fin de año, es una señal alentadora, más si la cifra de casos activos se redujo.

Si a eso le sumamos que, aunque incipientemente ya se empezó el proceso de vacunación del personal médico y personas adultas mayores en las zonas más alejadas y de mayor marginación del estado, podemos estar ante la posibilidad de un retroceso más consistente en los números de casos.

Dicho de otra forma, podríamos estar en el inicio de larga batalla final que pudiera durar hasta dos años, pero ya en avanzada en contra de la pandemia.

Ante esa posibilidad lo importante es no bajar la guardia y -al contrario- seguir con mucha disciplina los protocolos sanitarios y no permitir que haya un relajamiento en la movilidad social, laboral y comercial, sino al contrario, tomar consciencia de que la guerra en contra del virus aún no termina.

Que la pesadilla acabe lo antes posible está en manos de gobierno y sociedad.

Por lo pronto, ya se ve una pequeñísima luz al final del túnel.

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