EL SOPOR DEL BUITRE

Cuentas descuadradas

Por: Gerardo Sánchez García*
viernes, 21 de enero de 2022 · 00:12

En dos años la empresa Fisamex se llevó en Ensenada por andar de cobrona de los adeudos de agua, 22 millones de pesos por comisión-honorarios, informó la ex secretaria de la Honestidad y Función Pública, Vicenta Espinoza, en entrevista otorgada a la Agencia Fronteriza de Noticias (AFN) el 30 de diciembre.

Agregó que de lo recuperado por dicha empresa se aplicaron 101 millones de pesos en diversas obras de la Cespe en esta municipalidad y quedó un remanente de 12 millones de pesos, lo que daría una cifra de 113 millones de devaluados pesillos.

Sin embargo, en entrevista ofrecida a este reportero-columnista el director de la Cespe, Jaime Alcocer Tello, dio cifras diferentes.

Indicó que de lo recaudado por Fisamex -excluyendo su comisión-, se aplicaron 109 millones de pesos en diversas obras, lo que no cuadra con lo dicho por Espinoza en cuanto a inversión y contabilizando el supuesto remanente hay también una diferencia de tres millones de pesos.

¿Se trata de un problema de falta de comunicación entre funcionarios y ex-funcionarios?, ¿dificultades aritméticas o de dislexia entre quienes hacen las cuentas para proporcionar la información?

Un misterio por resolver y unas cuentas por aclarar. La transparencia y la rendición de cuentas deben ser principios básicos no sólo de la 4T, sino de cualquier gobierno federal, estatal o municipal, sin importar la ideología política o partidista del que provengan.

Austeridad legislativa
En sus redes sociales el diputado federal ensenadense Isaías Bertín Sandoval estuvo luciendo un exclusivo reloj marca Richard Mille, el cual según algunos catálogos de ese artículo establecen que tendría un precio de 600 mil dólares o 553 mil euros.

Ello, en el supuesto de que se trate de un modelo original, pues cabría la posibilidad de que fuera clonado o pirata, lo cual más que un incurrir en un engaño en el exceso de lujo o extravagancia, sería un delito, lo que podría ser mucho muy grave tratándose de un funcionario público.

En caso de tratarse de una pieza original, más que un delito se convertiría en un “pecado” político en un gobierno, movimiento político y partido que ha hecho de la austeridad uno de sus principales principios y que constantemente se desgarran las vestiduras señalando los lujos y excesos ajenos.

Una austeridad morenista que contrasta y es incongruente con un reloj y estilo de vida que es exhibido constantemente por un legislador que ha ido construyendo una carrera política que puede verse empañada por excesos innecesarios.

La modesta medianía del servidor público, sugerida y proclamada por Benito Juárez y de la que tanto habla el propio Andrés Manuel López Obrador.

Mecanismo protección a periodistas
La siguiente semana se anunció que se instalará en Baja California el mecanismo para brindar protección a periodistas y defensores de los derechos humanos. Ello como una respuesta al asesinato de Margarito Martínez Esquivel, fotoperiodista muerto el pasado lunes en la ciudad de Tijuana.

Condenable el asesinato e innegable la exigencia de justicia y castigo para él o los responsables, pero aún no se ha establecido jurídica y objetivamente que ese homicidio haya sido a causa de su actividad periodística, aunque todo hace suponer que así haya sido.

Sin embargo, ningún mecanismo será útil si no se captura al o a los asesinos, no de Margarito, sino de cualquier otro periodista o ciudadano o ciudadana.

Lamentablemente en la mayoría de los asesinatos de periodistas en México los homicidas no han sido capturados ni castigados.

La impunidad hecha abajo cualquier medida de protección, es impensable que en una sociedad democrática y en la que prevalece -o debería- prevalecer el Estado de Derecho, sea mejor resguardar, esconder, hacer huir a quien se vea amenazado que el capturar y castigar a quien amenaza o agrede.

En una de las muchas consignas que se dicen luego de este tipo de homicidios, en el gremio se señala que no se mata la verdad matando a los periodistas, lo que tal vez sea cierto, sin embargo, vivir o ejercer el oficio en un clima de incertidumbre, temor e impunidad es igualmente un crimen de suma gravedad, no sólo contra quienes viven de esta actividad, sino para toda la sociedad.

FRASE
“En un estado verdaderamente libre, el pensamiento y la palabra deben ser libres”

Suetonio, historiador romano.

*El autor es periodista y atlantista
 

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