BUFADORA

Políticos y líderes de opinión, autoridades, se encuentran estupefactos por el eco y repercusiones que tuvieron los asesinatos de los colegas Margarito Martínez, primero, y Lourdes Maldonado, después, ocurridos los dos en Tijuana, los dos periodistas y con una semana de diferencia entre uno y otro.

Parece redundante, pero estas características podrían ser otra línea de investigación, podría.

La sorpresa, decíamos, es mayúscula, porque ya antes han ocurrido crímenes de periodistas, incluso en todo el país ya son más de 50, y es caso inédito que la misma Unión Europea, Suiza o los Estados Unidos, a través de sus embajadas, expresen preocupación y solidaridad por estos acontecimientos.

Quien tuvo una opinión muy sensata e inteligente, es la reportera y jefa de AFN Noticias, la prestigiada colaboradora de estas páginas, Dora Elena Cortés Juárez, quien en su comentario con el también colega y no menos reputado periodista Martin Francisco Borchardt Tataki, durante su programa “Este Día”, observó que la repercusión podría tener como detonador el acumulamiento de casos, de crímenes contra periodistas en casi todos los estados del país; una especie de ya basta, de ya estuvo, de no más asesinatos, cuya chispa la prendió Margarito y explotó con Lourdes.

Quienes sin duda están más espantados son los o el autor intelectual de estos crímenes, el primero de acuerdo a primeros adelantos de la fiscalía, asociado a una inoportuna, imprudente y estúpida declaración hecha por un bloguero de Tijuana que acusó a Margarito Martínez Esquivel de una insensatez.

Pero si eso es así, entonces el crimen de Lourdes Maldonado adquiere una línea de investigación diferente, además que la misma fiscalía parece descartar que haya sido producto de su trabajo.

Los cables que no conectan, es ¿por qué Maldonado pidió la protección del mecanismo para periodistas? Si lo hizo es porque se sentía amenazada y, entre periodistas, eso ocurre por temas relacionados al desempeño.

Ya será trabajo de la Fiscalía, por lo pronto, en el gremio periodístico estatal lo que se advierte, además de la indignación y el coraje, es impotencia, ante la vulnerabilidad en que se encuentran todos. Nadie está a salvo, y por nadie, entiéndase que no solo periodistas, nadie.

Ley de la percepción

Escribía ayer un colega: La bala no disparada, esa imaginaria que siguió después de la que mató a Luis Donaldo Colosio en marzo de 1994, fue a dar en el pecho de Carlos Salinas. La otra bala invisible, posterior a la que mató al abogado Abraham Polo en junio de 1995, fue a dar contra el juez Saturnino Agüero.

En el caso del crimen del periodista Manuel Acosta Meza en julio de 1956 en Tijuana, los otros proyectiles rebotaron en el entonces gobernador Braulio Maldonado. Así, las que no dieron directamente a la cabeza de Lourdes Maldonado en Enero de 2022, se fueron contra el cuerpo de Jaime Bonilla. Se llama “ley de la percepción”.

Cuchillito de palo
No es intriga, pero como dicen, cuando veas un cadáver, busca al o los beneficiarios. ¿Quién o quiénes son los más acérrimos adversarios de Jaime Bonilla, capaz de jalar un gatillo? Es pregunta.

¡Ay cosita!

Pues ahora sí que el regidor Miguel Orea Santiago deberá pedir una disculpa pública -léase ante los medios de comunicación, presentes- a la ex candidata de la Alianza Va por México, Brenda Mendoza Kawanishi, por violencia política de género, y, además, su nombre -de Orea- deberá estar en la nada honrosa lista de infractores como persona sancionada por violencia política de género, durante un año.

Ayer, en un boletín de la Sala Regional Guadalajara del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), se informa que confirmó por unanimidad la sentencia del Tribunal de Justicia Electoral del Estado de Baja California (TJEBC) dictada en el procedimiento sancionador PES-110/2021 del 8 de diciembre de 2021.

En la citada sentencia, el TJEBC declaró la existencia de la infracción consistente en violencia política contra las mujeres en razón de género, atribuida al Regidor independiente, Miguel Orea Santiago, por la publicación en su perfil de la red social Facebook, de una imagen que, analizada en su conjunto constituyó propaganda electoral basada en estereotipos de género con el objeto de menoscabar la imagen pública de la entonces candidata a la Presidencia Municipal de Ensenada, postulada por la coalición “Alianza va por Baja California, ello durante el pasado Proceso Electoral local 2020-2021.

En tal virtud, dicen los magistrados electorales que encabeza el poblano Jorge Sánchez Morales, “el infractor deberá emitir una disculpa pública en presencia de medios de comunicación, así como también, se ordenará al Instituto Nacional Electoral y al Instituto Estatal Electoral de Baja California la inscripción del infractor en los Registros Nacional y Estatal de Personas Sancionadas por Violencia Política Contra las Mujeres en Razón de Género por un período de un año”.

Con todo y que las moralejas son varias, van aquí algunas. Se puede irrumpir en la política con ocurrencias, con el apoyo de páginas que explotan el morbo para hacerse de lectores, con lenguajes clasistas -sí, porque se apoderan de la jerga del barrio para legitimar su disfraz de pueblo- y actitudes de pandilleros, pero no se puede estar sobre la ley y, en este caso, sobre las bases mínimas del respeto hacia los demás, en particular, hacia la mujer. Is the law.

La sentencia de la sala Guadalajara es más que clara, contundente y definitiva. A propósito, la sentencia dice en presencia de medios de comunicación, no paginillas de Facebook. Por si pensaban evitar a los medios.