LA TURICATA

El mundo al revés

La realidad tiene la forma de nuestros prejuicios Eduardo Hurtado Por: José Carrillo Cedillo
martes, 4 de enero de 2022 · 00:00


“Hoy en día ya la gente no respeta nada. Antes poníamos en un pedestal la virtud, el honor, la verdad, la ley. . La corrupción campea en la vida americana de nuestros días. Donde más se obedece otra ley, la corrupción es la única ley. La corrupción está minando este país. La virtud, el honor y la ley se han esfumado de nuestras vidas”.

Declaración de AL CAPONE al periodista Undervilt, entrevista publicada en la revista LIBERTY el 17 de octubre de 1931 unos días antes de que CAPONE ingresara al penal.

Aseguro que de verdad quiero creer nuevamente, como cuando era niño, en que sí hay justicia en nuestro país; pero los hechos que día a día reporta la prensa seria, me lo impiden. Soy un ignorante de los puntos finos de la ley que en teoría nos rige a todos los mexicanos.

Bien, pero no encuentro explicación al hecho de que a un paria que roba un paquete de donas en una tiendita, si lo sorprenden y lo acusan, tiene como sentencia 20 años de cárcel y un señor prácticamente confeso del robo, perdón “desvío” de miles de millones de pesos del erario, viva a cuerpo de rey en su palacete de una colonia popof, mientras sus abogados, que por cierto cobran miles de pesos por minuto, buscan las artimañas “legales” para que si acaso pisa la cárcel, sean los menos años posibles y ya en la cárcel pernocte en celda VIP.

Y una señora que todos vimos (por las notas periodísticas) cómo, con su anuencia, corrían ríos de dinero hacia Palacio Nacional, ahora se diga inocente y “perseguida política” argumentando (copiando a la profesora libre), que está muy enferma y sus familiares piden que recemos por su libertad.

En cuanto a la profesora mencionada está gozando de plena salud, en su lujoso penthouse y mangoneando en su partidito-negocio familiar donde su yerno parte el queso, desde luego con la supervisión de la jefa que goza sus miles de millones que le “heredó” su santa mamacita, de todos mis respetos.

Regresando a la “estafa maestra” como se le denomina por la prensa, recientemente fue liberado un acusado de ser cómplice, porque, dice la nota, no se especificó en la acusación, qué punto del manual de responsabilidades administrativas fue el que violó, y además, agrego yo, faltó la copia verde para el conserje del edificio.

A mí me suena a “chicanada legal” como muchos que obtienen “amparos” que parece se venden como chuchulucos, probablemente a muy buen precio. Llegamos al punto: muchos hechos más, que son públicos nos hacen sospechar que la justicia se vende por quienes están encargados de vigilarla y hacerla cumplir.

Y los meros peces gordos prianes ya se exhiben sin rubor en las páginas de las revistas del corazón, gozando de sus millones “desviados” sin temor a ser llamados por la justicia a pagar sus hurtos y errores por malas decisiones y vender la patria a pedazos y se esconden gritando contra el actual gobierno, para desviar la atención, pues la moda para parecer valiente e inteligente es criticar a gritos en la “prensa” TODO lo que hace el gobierno actual, que ganó inobjetablemente con las leyes anteriores gobiernos.

La verdad es que los ricos ahora desfavorecidos y los clasemedieros que sueñan con ser ricos, gritan por la herida y hacen manifestaciones de protesta manejando en grandes filas en sus autos y en lugar de gritar a voz en cuello, como los pobres cuando nos manifestábamos, estos suenan las bocinas.

Más claro, ni el agua.

Se puede ser necio, pero no presumirlo.

jcarrillocedillo@hotmail.com



 

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