Revocación a las prisas

Los instrumentos de democracia directa, como la consulta popular, el plebiscito, la iniciativa ciudadana o la revocación de mandato, se utilizan muy poco y mal en el país, debido a que los gobiernos estatales y federal someten a las instituciones electorales, cuya independencia y autonomía se pierde cuando son estranguladas a través de recortes a su presupuesto.

En el caso de Baja California, se observan enormes resistencias para que las autoridades utilicen estas figuras para conocer el verdadero sentir de la población, porque ni siquiera en temas tan simples se atreven a implementarlas.

Desde hace años se ha propuesto en Ensenada y el resto de la entidad que los ciudadanos determinen las políticas públicas a seguir en materia de transporte público, uso de suelos, permisos para la venta de alcohol, la designación de espacios recreativos de uso común, y sobre la viabilidad de proyectos para grandes obras de infraestructura.

Así que la llamada democracia directa sólo está presente en el discurso de la clase política en el poder y la oposición, porque los partidos no son capaces de consultar ni a su propia militancia, a la cual le imponen candidatos.

Es por eso que resulta preocupante que el Instituto Nacional Electoral (INE) anuncie ajustes en proyectos institucionales para realizar la revocación de mandato, prevista para el próximo 10 de abril.

Tras una sesión extraordinaria de la Junta General Ejecutiva, el presidente del INE, Lorenzo Córdova, informó sobre las decisiones aprobadas para organizar el ejercicio en tres meses.

“Solamente se le da a esta institución un plazo de apenas tres meses, y ahora va a ser menor todavía por las resoluciones y decisiones que se han ido modulando para la realización de un ejercicio inédito en el país”, expuso el consejero.

De ahí, dijo, que se tengan que tomar decisiones que modifican la planeación original.

“Como se dice coloquialmente, en muchas ocasiones (se toman decisiones) a mata caballo y esto no es un producto de una mala planeación, es producto del diseño de una nueva figura que sigue como si fuera una elección, pero que es distinta en muchos sentidos, para empezar, en los tiempos que se tiene que organizar”, añadió.

En la sesión de la Junta Ejecutiva, que preside Córdova y en la que participan directores de las áreas operativas, se acordó reducir 50 por ciento el apoyo financiero a los consejos locales y distritales que apoyen en el ejercicio.

Acordaron avanzar en la adquisición de materiales, así como en la emisión de la lista nominal de electores con fotografía que será utilizada el día de la jornada revocatoria.

A más tardar, el 4 de febrero se confirmará la validación de alrededor de 2.7 millones de firmas de ciudadanos a favor de la consulta de revocación del mandato del presidente de la república.

Si en cuestiones electorales se continúa con la simulación y el autoengaño, será muy difícil que México salga adelante.