DESDE EL VIGÍA

Gramo mortal

Por: El Vigía
miércoles, 8 de febrero de 2023 · 00:08

Para entender la dimensión del problema que implica el consumo del fentanilo, las personas deben tener claro que la dosis letal de esta droga es de un tamaño menor a un grano de arroz.
En México no hay forma de hallar la presencia de fentanilo en las pruebas antidoping, por lo que la detección de esta sustancia debería incluirse en todos los exámenes de toxicología, consideró Carlos Galicia Galicia, asesor en salud mental y trastorno por uso de sustancias.
“Los reactivos que existen en este momento en el mercado para hacer antidoping no incluyen el fentanilo”, explicó el también especialista en conductas adictivas y movilización social.
“A esto hay que sumar que existen análogos que no sabemos qué contienen, porque son fabricados en laboratorios clandestinos y sólo quienes los elaboraron saben el tipo de precursores que usaron”, alertó.
Galicia Galicia mencionó que, según un estudio del Centro de Investigación y Docencia Económicas sobre el consumo de drogas en la frontera norte, una gran cantidad de mujeres son usuarias de fentanilo en México, principalmente en Tijuana, San Luis Río Colorado y Ciudad Juárez.
El asesor expuso que el problema es que el fentanilo no farmacéutico se fabrica ilegalmente y a menudo se combina, en forma de polvo o líquido, con drogas ilícitas, como cocaína, metanfetamina y heroína.
Por lo tanto, el incremento del uso de fentanilo es un enemigo silencioso, porque cuando es producido de forma ilegal, suele ser usado por los narcotraficantes para “cortar” otras drogas sintéticas, lo que ocasiona que más consumidores se expongan a una sobredosis incluso sin saber que lo consumen.
Sandra Fabiola Velasco, doctora en ciencias biomédicas, explicó que el fentanilo es un opioide sintético de 50 a 100 veces más potente que la morfina y cuyo uso es controlado y recetado comúnmente después de una cirugía o cuando un paciente ya creó tolerancia a otros opioides.
Debido a su potencia, cuando se receta deben ser dosis controladas y administradas mediante inyecciones, en forma de parche, sobre la piel o en pastillas que se disuelven en la boca.
Sin embargo, el problema de salud pública radica en que actualmente se está produciendo de forma ilegal con precursores de procedencia y calidad desconocida, así como en condiciones insalubres.
“Cuando este fentanilo se produce de manera ilegal, entonces lo vamos a encontrar en forma de polvo, lo vamos a ver en papel secante, puede venir en envases como tipo gotas para ojos y puede venir en rociadores nasales. Lo mezclan mucho con otras drogas como heroína, cocaína, metanfetamina y el MDMA”, precisó la especialista.
De acuerdo con la académica, de forma ilegal la sustancia es mezclada con otras drogas para causar un efecto más rápido y con éste generar tolerancia y adicción fácilmente.
“Le pueden meter una cantidad que puede inducir a un paro en la persona, es muy peligroso, los puede dejar en un paro respiratorio, en un paro cardíaco, por no saber obviamente cuánto fentanilo están mezclando en esta droga”, acotó.
Ante estas acciones, quienes consumen otro tipo de drogas quedan expuestos, pues no saben cuánta cantidad de fentanilo está mezclada y esto puede ocasionar una sobredosis o envenenamiento.

...