CIENCIA Y DESARROLLO

Exponer y ocultar en la inteligencia artificial

Por: Gustavo Olague*
lunes, 21 de abril de 2025 · 00:00

La palabra exponer procede del latín “exponere” que quiere decir colocar a la vista, es decir expresar o exhibir algo, y se compone del prefijo “ex-” que significa hacia afuera, más “ponere” que equivale a poner. Por otro lado, el antónimo de exponer es ocultar que también viene del latín “occultare” que quiere decir esconder y se compone del prefijo “ob-” que significa contra, frente y el verbo “cultare” frecuentativo de “celare” que se traduce como esconder. La palabra ocultar se asocia con otras como oculto, ocultismo, clandestino, célula, ceja y color. Además, en los sinónimos de exponer encontramos palabras como exhibir, presentar, mostrar, formular, explicar, manifestar, referir, exteriorizar, alegar, declarar, plantear, representar. Las palabras no son ni buenas ni malas, pero su uso se aplica a las acciones que realizamos que si pasan por nuestro juicio ya sea propio o colectivo. 
Al revisar la definición de exponer podemos asociar significados positivos y negativos. Por un lado, en la educación y la ciencia es común escuchar decir que vamos a asistir a una conferencia o clase donde alguien va a exponer sobre un tema en particular como la inteligencia artificial (IA) y se espera que el experto exponga de manera clara cuestiones o descubrimientos a un grupo de personas de forma que se comparta un conocimiento. En las escuelas en todos los niveles se espera que dicha actividad sirva para interiorizar las ideas expandiendo el conocimiento tanto de alumnos como de profesores. El conocimiento puede ser tanto del propio expositor como del trabajo ajeno de un tercero que en el recinto donde se exponen las ideas se estudia para profundizar y ser capaz de replicar o derivar ideas de una forma práctica. 
Estas actividades persiguen diferentes propósitos y en la actualidad la IA está transformando la forma no solo en que se llevan a cabo dichas actividades de exposición de ideas sino de los mismos recintos donde se llevan a cabo. Después de la difícil prueba que la humanidad paso en la pandemia, la tecnología dio paso a la exposición de ideas de forma remota y virtual. El internet ofrece una plataforma para establecer comunicación que en combinación con la IA provee de formas de interacción que la mayoría de la humanidad no previo en su niñez y juventud. Esta realidad que todos vivimos dio paso a considerar los temas de ética como principios rectores donde no existe un consenso en lo que está permitido o no hacer, ya que los objetivos se convierten en intereses. De aquí que se proceda muchas veces a la necesidad de ocultar lo que se hace ya sea porque es moralmente malo o porque se juzga como valioso o privado.
La información tiende a ocultarse no solo porque es útil sino porque puede ser sensible y se debe limitar el acceso o conocimiento a un público más amplio. Hoy en día es posible que alguna acción llegue a conocerse mundialmente de forma casi instantánea como cuando se asiste a eventos masivos que se tramiten en vivo directamente en nuestro teléfono móvil. El manejo de nuestra información es tan penetrante que invade nuestro círculo íntimo que es necesario ocultar de alguna manera su uso. 
La tecnología asociada a la IA se dice que es inteligente como una forma de eufemismo para ocultar la responsabilidad que tienen aquellas personas físicas o morales respecto a la utilización de la información. Hoy en día es cada vez más común no leer no solo la letra pequeña, sino los contratos para acceder nuestra información. Muchas personas cada vez más coinciden en que la mejor manera de resguardar nuestra información es hacerlo en respaldos analógicos como pluma y papel.

*Investigador Titular D, CICESE
olague@cicese.mx

...