La Bufadora

Sin contrapesos
Con partidos de oposición reducidos a cenizas, con dirigentes empresariales divididos, sin presencia nacional y alejados de la gente, con universidades en silencio, científicos enclaustrados y agrupaciones civiles extraviadas en sus pequeñas agendas, el único contrapeso real y que comienza a minar la popularidad del presidente Andrés Manuel López Obrador, es la pandemia del coronavirus y tal parece que esa es la única apuesta política de sus detractores.
Muchos de los adversarios de la 4T carecen de calidad moral para cuestionar lo que se considera una pobre respuesta de la federación ante las graves repercusiones económicas ocasionadas por el obligado parón que impuso la contingencia sanitaria mundial, dado que la mayoría de sus voceros son ex funcionarios públicos y empresarios consentidos de anteriores sexenios que en su momento tampoco resolvieron los rezagos que hoy reclaman que se atiendan.Lo preocupante es que no surgen nuevos liderazgos en el sector privado con antecedentes limpios, y en el sector académico se resguardaron en casa desde antes del coronavirus, no se diga en el Poder Judicial o en el resto de los órganos autónomos, donde nadie se atreve a levantar la voz, porque no tienen credibilidad, hasta parece que todos ellos trabajan para el presidente, porque están igual de sumisos que los integrantes de su gabinete.

Descarta plan anticrisis 
El presidente Andrés Manuel López Obrador reiteró que no habrá otro plan para reactivar la economía ante la crisis provocada por el Covid-19, y acusó a los críticos de su estrategia de buscar el “banderazo de salida” para reinstaurar la corrupción en el país, sin embargo, el presidente no ve más allá que la crisis está a la vuelta de la esquina, ocasionado, en primera, por la pandemia y en segunda, porque su política social, nos llevará a la ruina económica.
Luego que líderes empresariales, legisladores, líderes políticos y expertos cuestionaron la estrategia y la consideraron insuficiente, insistió en que, a diferencia de fórmulas del pasado, ésta da preferencia a la gente más pobre y humilde.
“Nosotros decidimos que el plan proteja, primero, a la mayoría, entonces, ya no va a haber otro. Porque estaba yo viendo en las redes algunos que decían: ‘¿dónde está el plan?, no escuchamos nada’. Son medidas que no se mueven”, afirmó.
“Consideramos que pronto se va a reactivar la economía. Es un nuevo modelo, no podemos seguir con lo mismo porque sería, entre otras cosas, un absurdo. El coronavirus lo que precipitó fue el derrumbe del modelo neoliberal en el mundo, eso ya no funciona”.
El plan de reactivación, anunciado el domingo pasado por López Obrador, recetó subsidios, créditos y presupuesto para las megaobras prioritarias, como Dos Bocas y Santa Lucía, aunque quedó corto para las pequeñas y medianas empresas. 
- ¿Son medidas que no se mueven?, le preguntaron en su conferencia matutina.
- Es esto, solamente que esto objetivamente no funcionara, pero no nos adelantemos, no descalifiquemos, pidió.

Y va por 3 mil mdp 
El gobierno federal pretende obtener 3 mil millones de pesos por el recorte que aplicará a los salarios de los altos mandos y la cancelación del aguinaldo de fin de año, con el objetivo de inyectarlos al plan anticrisis por el Covid-19, con base a lo informado por el presidente López Obrador.
“En total deben de ser como unos tres mil millones, en total. Las medidas, lo que van a dejar de ganar los altos funcionarios públicos, de recibir, pero hay otras acciones”, expresó.
“Arriba vamos a hacer algunos ajustes, es decir, disminución de sueldos, vamos a procurar hacerlo de manera progresiva, que se reduzca más a los que reciben más salario y menos a los que tienen menor nivel”.
Como lo anunció el domingo pasado en su informe trimestral realizado en Palacio Nacional, el mandatario señaló que estas medidas se aplicarán sólo a altos funcionarios del gobierno federal, desde subdirectores hasta el presidente de la república.
“Lo mismo en el caso de la decisión de no cobrar aguinaldo y otras medidas que ahí van a ir ustedes conociendo”, indicó.
También destacó que los tres mil millones de pesos se sumarán a la bolsa de recursos presupuestales con la que su administración hará frente a la emergencia por la pandemia del coronavirus.
López Obrador informó sostuvo una reunión con su gabinete para consultar y consensuar la medida, que ya había sido planteada desde finales de marzo en otro encuentro privado.
El jefe del Ejecutivo federal también tiene contemplado obtener mayores recursos de la reducción de gastos de publicidad y las partidas de viáticos y gastos de operación, así como los decomisos a la delincuencia organizada y de cuello blanco. Aunque al final quedará en bellas palabras.