Controlar gasto público

Una vez que pase la contingencia de la apreciación del dólar frente al peso, lo más importante es que el gobierno federal controle los niveles de gasto público y endeudamiento para que no haya un deterioro de la situación económica del país, demandó Gustavo de Hoyos, presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex).

Sostuvo que regular el gasto público es "para mantener una inflación razonable, que es lo que ha permitido tener un desarrollo”.

Resaltó que la estabilidad económica es el principal activo que el país debe mantener.

El dirigente de la Coparmex, dijo que en el corto plazo, ante la apreciación del dólar, la Secretaría de Hacienda y el Banco de México deben hacer uso de instrumentos de política cambiaria a su alcance.

De Hoyos explicó que esta situación ha provocado un reacomodo en los costos de las empresas, lo cual repercutirá en los precios, por lo que es necesario regresar al tipo de cambio a un nivel razonable.

Por su parte, los contadores públicos del país demandaron a los legisladores replantear por completo el Paquete Económico para el próximo año, pues el gobierno no se ajustó lo suficiente y algunas variables macroeconómicas planteadas ya quedaron desfasadas.

El Instituto Mexicano de Contadores Públicos (IMCP) reclamó que se modifique el Paquete Económico, tanto en la parte de ingresos como egresos, si se quiere impulsar la economía y los negocios y mejorar las finanzas públicas.

"Creemos que el superávit primario debe alcanzar por lo menos el uno por ciento del PIB para que ante los graves riesgos del entorno nos aseguramos que no se vaya a perder la calificación crediticia. Además, sugerimos hacer un esfuerzo adicional de disminución en el gasto corriente tanto en el poder Ejecutivo como en el Legislativo y Judicial, así como en el gasto de los estados”, señaló Leticia Hervert, presidenta del IMCP.

Al IMCP le parece que algunas variables macroeconómicas planteadas quedaron rebasadas y se tienen que modificar para tener un Presupuesto realista.

 Por ejemplo, Hacienda planteó un tipo de cambio promedio de 18.20 pesos por dólar en 2017, no obstante el promedio actual rebasa ese nivel y no se prevé que pueda bajar lo suficiente para ajustarse a la previsión.