“La Habana libre y la antropología”

Por:  Arqlga. Julia Bendímez P.*

 

Después de muchos años de tener la ilusión de participar en la Conferencia Internacional de Antropología en Cuba, que se celebra cada dos años en la Habana, pude finalmente hacerlo realidad; días atrás asistí a su XIII edición junto con otros investigadores con quienes conformamos un panel denominado Arqueología y Arte Rupestre de la península de Baja California y Sur de California.  Esta mesa de trabajo fue coordinada por el arqueólogo Antonio Porcayo Michelini por parte del Instituto Nacional de Antropología e Historia y Racso Fernández Herrera investigador del Instituto Cubano de Antropología.

El Instituto Cubano de Antropología cumple con la misión de realizar y promover investigaciones científicas y aplicadas que dan cuenta de la identidad histórica y cultural cubana y de otras áreas del Caribe y de Latinoamérica. Es una institución que contribuye de manera importante a fortalecer la conciencia de identidad del pueblo cubano y que promueve la salvaguarda del patrimonio  histórico-antropológico de esa nación. En cuatro días los temas expuestos fueron sobre estudios antropológicos relacionados con la educación, el turismo, los museos y la museología, la gestión y la administración del patrimonio cultural, la religión y visión cosmogónica, economía y el trabajo, la lingüística, la vida rural y la urbana y los contextos arqueológicos y el arte rupestre.  

Los asistentes pudimos apreciar de manera general el pensamiento antropológico de la isla y las aportaciones hechas por los ponentes cubanos y quienes procedían de países como Portugal, España, Colombia, Argentina, Panamá, EE.UU. y por supuesto México. 

Nuestro panel aportó valiosa información sobre la arqueología de las regiones en las que trabajamos y dio lugar a una discusión sobre nuevas técnicas utilizadas para el estudio de sitios arqueológicos como los concheros, los objetos prehistóricos y etnográficos como las ollas de cerámica y puntas de proyectil y los novedosos procesos para discernir el arte rupestre. Los temas que llevamos fueron: "Cerámica de los grupos nómadas del norte de B.C.” por Antonio Porcayo; "El poblamiento costero e insular de la península de B.C.”; por Harumi Fujita, Rancho Codornices: ¨Sitios gran mural de la frontera norte en B.C.” por John Harmon; El estilo de arte rupestre de la Rumorosa del sur de California y norte de B.C.” por Ken Hedges; "El Camino real de Las Californias” de mi autoría; "Identificación de fuentes de obsidiana del sur de California y norte de B.C. por medio de XRF” por Lee Panich y Antonio Porcayo; "El estilo de Arte Rupestre Gran Mural en el estado de B.C.S.” por María de la Luz Gutiérrez; "Los cazadores recolectores de la costa del Pacífico norte de B.C. por Rubén García y Gengis Ovilla y El gran lago Cahuilla: entre los desiertos del sur de California y B.C.” por William Eckhardt. 

Sin duda los temas que tratamos dieron presencia a nuestro terruño en una comarca distante pero en muchas formas interesada en nuestros proyectos y su posible aplicación a los suyos. Este vínculo académico entre antropólogos y arqueólogos cubanos y mexicanos  (incluyendo colegas de California E.U) nos llevaron a esbozar un acuerdo para continuar colaborando con el Instituto Cubano en el futuro inmediato con talleres y otros intercambios académicos, cosa que nos entusiasma de sobre manera. 

Durante nuestra estancia conocimos la capital cubana, su centro económico y cultural, sus carros "vintage” de los 50s, sus ciudadanos amables, trabajadores e inteligentes. Caminamos por La Habana vieja de gran colorido, cuyo casco histórico fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1987. Hicimos muchos amigos que esperamos pronto volver a ver.

* Inv. Delegada del Cinah-BC