CULTURA
María Katzarava marcará con voz
La reconocida soprano regresa al país que la vio nacer y donde despertó su pasión por el bel canto, luego de asombrar a exigentes públicos
REDACCIÓN/EL VIGÍA
Tijuana, B. C.
Con la privilegiada voz de la mexicana María Katzarava el próximo 8 de febrero, a las 20:00 horas, se abrirá el telón de la Sala de Espectáculos del Centro Cultural Tijuana, organismo de la Secretaría de Cultura, para iniciar la programación de actividades escénicas de este 2018 con el monólogo operístico “La voz humana” al lado del pianista Abdiel Vázquez.
La reconocida soprano regresa al país que la vio nacer y donde despertó su pasión por el bel canto, luego de asombrar a exigentes públicos en países como Italia, Francia, Rusia, España, Japón, Corea del Sur, Emiratos Árabes, Estados Unidos, Austria donde pisó los más importantes escenarios al lado de grandes representantes de la ópera.
Poderosa presencia
Su formación como soprano se ha enriquecido con sus raíces georgianas, y le ha abierto un lugar importante a su privilegiada voz que proyecta tonos graves que se perciben profundos y dramáticos, hasta agudos brillantes y coloridos.
Su poderosa presencia escénica y sus grandes facultades histriónicas han hecho de María una artista completa que ya cuenta con más de veinte roles de ópera y un importante número de conciertos de gala a lo largo de más de diez años de carrera.
En el 2006, Maria hizo su debut en el Palacio de Bellas Artes de la Ciudad de México en el papel de Stéphano en la obra Roméo et Juliette de Gounod, cantando al lado de grandes voces como Rolando Villazón y Anna Netrebko.
Desde entonces ha cantado con renombrados maestros del género como Ramón Vargas, Plácido Domingo, Andrea Bocelli. Como desarrollo natural de su voz, Maria Katzarava comenzó a incursionar en roles que se han convertido en sus últimos papeles más emblemáticos.
La soprano entró en la mira internacional cuando ganó el “Primer Premio” y el “Premio Zarzuela” en la mundialmente reconocida competencia “Operalia” de Plácido Domingo en 2008.
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