El gigante de Ensenada Lobos

Ángel Domínguez/EL VIGÍA
adominguez@elvigia.net

| Ensenada, B. C.

Brandon Hassell arribó a Ensenada con credenciales de haber egresado de la Universidad Estatal de Pennsylvania, una de las instituciones con mayor tradición en Estados Unidos.

Representando a Nittany Lions de Penn State, de la cual egresó de la facultad de parque recreativo y gestión turística con grado de bachiller, el jugador de 2’08 metros, participó en la Conferencia de los 10 Grandes de la NCAA.

El norteamericano de 33 años estuvo disponible en el draft 2008 de la National Basketball Association (NBA), y a pesar del interés mostrado por Pacers de Indiana y Knicks de Nueva York nunca llegaron a un acuerdo.

Brandon, seguidor de las hazañas de Michael Jordan, heredó el talento de su padre, exjugador de 1’90 metros de la Fuerza Aérea en el estado de Ohio, quien realizó giras por diferentes países.

Sin embargo, la altura viene del lado materno, donde “tengo un tío de 2’08 y otro de 2’13 – metros-”, detalló.

“De pequeño también intenté en futbol americano y soccer pero en segundo año de preparatoria, decidí dedicarme únicamente al baloncesto”, comentó.

“VACAS FLACAS”
Durante sus cuatro temporadas colegiales, Hassell fue parte de un proceso de reconstrucción en la Universidad Estatal de Pennsylvania.

“Fueron años de transición en los que me tocó aportar al crecimiento del equipo, las asistencias de aficionados mejoraron, fue una buena experiencia y tiempos divertidos”, apuntó.

Entre sus rivales mencionó a jugadores que en algún momento de su carrera llegaron a NBA como Deron Williams, Greg Oden, Luther Head, Chris Hill y Paul Davis, entre otros.

“Cada noche era una batalla en Big Ten, una conferencia muy fuerte desde Minnesota hasta Northwestern; recuerdo que en mi año sophemore, le ganamos en su cancha al tercer sembrado Illinois, con el mejor equipo que formaron en un buen tiempo y fue algo especial estar en el Top 10 de ESPN”, resaltó.

En general, continuó, “amé esos cuatro años, la experiencia de jugar con esas personas y con mis compañeros de clase con los que mantengo comunicación, son mi familia de basquetbol y es difícil describirlo, es un juego pero hay más allá en cuanto a crecimiento”.

En 2008, al concluir sus estudios universitarios, ingresó al draft de NBA donde recibió llamadas de Pacers de Indiana y Knicks de Nueva York, aunque terminó recorriendo el mundo durante siete años esperando su oportunidad.

“Fui a jugar a Uruguay, regresé y me pedían que me mantuviera activo y trabajando”, es por eso que se embarcó en nuevas ‘aventuras’ por Finlandia, Suecia, Japón, Canadá y en Estados Unidos, “tratando de de estar pendiente para saber donde se abriría una puerta”, explicó.

Sus esperanzas se fueron desvaneciendo debido a una lesión de espalda que lo obligó a abandonar las duelas por espacio de tres años.

En su retorno al deporte de alta competencia, se unió a un campamento que se efectuó en Las Vegas, Nevada.

Brandon Hassell tomó parte en dos partidos de exhibición contra Dorados de Chihuahua, quinteta de Liga Nacional de Baloncesto Profesional (LNBP) a la que pertenece el ensenadense José Luis Bucio González.

En el desarrollo de los partidos surgió el nombre del nativo del estado norteamericano de Ohio como posible refuerzo de Ensenada Lobos.

“Creo que Bucio me pudo haber recomendado con el coach Marcelo - Elusich-, mi agente me trajo para acá y me encanta esta ciudad”, aseveró.

Como parte del proceso de adaptación a diferentes idiomas, culturas y comidas, “debes de ser muy abierto”.

“Nunca había vivido en México, solamente de vacaciones en Playa del Carmen, en high school llevé clases de español y en Uruguay aprendí algo pero me siento ‘oxidado’ porque no he practicado en mucho tiempo”, precisó.

CONTENTO EN ENSENADA
El impacto causado por Brandon Hassell en su ‘nueva casa’ fue inmediato al ser acogido con entusiasmo por el resto de la plantilla.

“Entrenando todos los días con los muchachos recoges mucho”, aunado a que, “la directiva no te trata como un producto sino como gente aunque el basquetbol sea un negocio y yo aprecio que el presidente – Erick Barraza- siempre esté pendiente de nosotros”, enfatizó,

En cuanto al apoyo de los aficionados, manifestó que, “he estado poco más de un mes pero los aprecio mucho, me encanta la gente y definitivamente regresaría, incluso, ya lo platiqué con Jeff – Early-”.

Por otra parte, alabó las cualidades de los juveniles William Soto González y José Leonardo Villavicencio Cabrera.

“Son Sub 17 y Sub 21 aunque se desempeñen con mucha seguridad, ahora ya son buenos pero serán mucho mejores, siempre y cuando mantengan los pies en la tierra”, vaticinó.

El gigantón se declaró un amante de la comida mexicana, es especial, de “los tacos de pescado y camarón, que son increíbles”.

“Al llegar a Ensenada sabía lo que necesitaban de mi para ayudarle a este equipo a ganar, que baje rebotes, que sea fuerte adentro, y es lo que trato de hacer cada partido, defensivamente, soy muy competitivo y no me gusta que me anoten, ofensivamente, tengo un primer paso rápido y manejo bien el balón para alguien grande”.

Brandon Hassell