Juegan rol importante

Agencia Reforma
Ciudad de México

El Abierto de Estados Unidos enfrenta a través de la tecnología el desafío más importante de su historia al celebrar sin espectadores en el estadio.

SEGUIDORES INCLUIDOS
Recrear la energía del público fue uno de los ejes principales del proyecto que IBM, el socio digital de la USTA (United States Tennis Association) desde hace 29 años, desarrolló mediante nuevas e innovadoras experiencias para los fans, construidas con inteligencia artificial (IA) y basadas en tecnologías de nube híbrida.
Esto permitirá a millones de seguidores de todo el mundo experimentar la emoción y el vívido debate que rodea al icónico Grand Slam estadounidense, en su primera edición sin público presencial.
Los fans del deporte blanco podrán participar en forma remota en rivalidades deportivas icónicas denominadas Open Questions, y gracias a esta tecnología podrán compartir sus opiniones sobre los debates y participar en temas que les apasionen.
También podrán convertirse instantáneamente en expertos sobre los jugadores y las competencias del torneo con nuevos conocimientos basados en IA antes de cada partido. Match Insights utilizará la tecnología NLP para buscar, comprender y relacionar millones de artículos, blogs y referencias para recopilar la información más relevante. De este modo obtendrán información basada en hechos sobre los jugadores y sus oponentes antes del partido.

CALIFICARON EMOCIONES
Entre los desafíos que enfrentó la USTA fue que con dos meses de anticipación, desde que se anunció la celebración del torneo, buscaban recrear los sonidos de los espectadores en el estadio. En otros deportes como el futbol europeo lo hicieron a través de cartones con fotografías de los aficionados o en México de manera virtual en las gradas. Pero, la USTA a través de Sonidos con IA simuló el ambiente sonoro desde las tribunas que se extrajeron de cientos de horas de imágenes de video captadas durante el torneo del año pasado.
Calificaron el nivel de emoción de cada clip, a fin de compilar un carrete destacado en tiempo casi real y catalogar reacciones específicas, incluso el rugido de la multitud.