Va Andrea Altamirano por “ilusión deportiva”

Redacción/EL VIGÍA
Ciudad de México

Ser vegetariana y destacar en disciplinas deportivas donde el músculo y la fuerza son lo primordial, no es imposible. Andrea Altamirano Toledo, alumna de la Facultad de Psicología, es un ejemplo de ello, pues desde hace nueve años incorporó el ovolactovegetarianismo a su estilo de vida antes de entrar de lleno al deporte, primero con la práctica de powerlifting para después incursionar en el fisicoconstructivismo, alcanzando en ambos ámbitos el honor de representar a la UNAM.

A finales del año 2019, Andrea Altamirano tuvo su primera competencia nacional como atleta auriazul en el también llamado fisicoculturismo, por lo cual la irrupción de la pandemia por la Covid-19 en el 2020 significó un golpe anímico al que debió sobreponerse con entrenamiento en casa.

Si alguien quiere iniciarse en el vegetarianismo, debe hacerlo con acompañamiento de especialistas, subraya la atleta auriazul al tiempo que detalla su propio proceso. “Mi introducción al ovolacteovegetarianismo fue gradual y con orientación médica. Mi dieta permite el consumo de huevo y lácteos, además de Complejo B y suplemento de proteína”.

De niña soñaba con ser gimnasta y admiraba las fotos de mujeres atletas que entrenaban y cuidaban su cuerpo. En el inicio de su etapa universitaria, influenciada por algunos compañeros de clase que acudían con frecuencia al gimnasio, Andrea Altamirano adquirió la misma costumbre. “Al hacer ejercicio, tus hábitos cambian. Es como un escalón que te lleva a otro, primero te convences que es por salud, después, cuando ves los resultados, nace el gusto, y más adelante, ese gusto se convierte en un hábito”.

Un momento que Andrea Altamirano considera crucial en su carrera deportiva fue cuando el entrenador de powerlifting de la UNAM, Adán Escobar, decidió integrarla a la escuadra puma. “Estando en un equipo representativo es más grande mi compromiso”, subraya la universitaria.

UN 2020 LLENO DE APRENDIZAJE
Durante el año 2020, Andrea Altamirano obtuvo el segundo lugar en la categoría Bikini Model Chica Clase B del Campeonato Promesa 2020 de fisicoconstructivismo, celebrado en marzo; el tercer sitio en la categoría Miss Bikini Chica del Señor México y Señorita México Fitness 2020 a nivel nacional, en noviembre; y el campeonato en el Open Primer Regional de la Liga Mexicana de Powerlifting, luego de sumar un total de 260 kilogramos levantados. Estos eventos se celebraron con estrictas medidas sanitarias y los resultados auguran un futuro promisorio en el inicio de la carrera de la universitaria en el fisicoconstructivismo.

En los certámenes de este deporte, los jueces califican la musculación en tríceps, bíceps, espalda, glúteos y abdomen, además de la soltura con la cual camina la atleta sobre la tarima. “Mi fuerte es mi carisma, suena egocentrista pero califican también eso. Incluso la sonrisa, aunque ahora hay la limitante del cubrebocas; el maquillaje debe ser armonioso con el bikini sin verse grotesco, el cabello debe estar peinado y arreglado, todo eso cuenta”, afirma la alumna-deportista.

La ilusión deportiva de Andrea Altamirano es consolidarse como un referente a nivel nacional en fisicoconstructivismo y representar a México en competencias internacionales a la par de titularse en administración y psicología, con el objetivo de crear su propia empresa de fitness.