Cuenta el cielo con su ‘Zurdo’

Gabriel García/EL VIGÍA
ggarcia@elvigia.net | Ensenada, BC

Héctor León “Zurdo” Sarabia Villavicencio pasó de ser una leyenda viviente del Off-Road a un inmortal de este deporte al fallecer el viernes pasado, deceso que llena de luto a las Bajas.

El fundador del legendario equipo El Espíritu de Ensenada descansa ya en paz y seguramente estará manejando un carro en las pistas celestiales.

Apenas en junio pasado el “Zurdo” había sido parte de los festejos del aniversario 50 de su equipo, que hoy en día sigue participando en el Off-Road gracias a sus hijos Héctor y Juan Carlos, así como su bisniesto Héctor.

Ayer mismo se le dio el último adiós a Héctor León, quien fue recordado por cientos de personas en su velorio y también en las redes sociales, aunque ya en los últimos años su salud se había deteriorado y tenía que usar silla de ruedas.

Se recuerda la amistad del “Zurdo” con leyendas de las carreras fuera de camino como Sal Fish, Parnelli Jones, Walker Evans, quienes en diferentes ocasiones fueron auxiliados por el mexicano, quien fue de los primeros tricolores en correr la Mexican 1000 de Norra, hoy en día lo que se conoce como la Baja 1000 de Score International.

PIONEROS AZTECAS DEL VOLANTE
Los ensenadenses vivieron su primera carrera con Ricardo Córdova en una Baja 500 de Norra y también dijeron presente en la Mexican 1000, odisea que fue algo único hasta La Paz.

A pesar de no terminar la carrera en tiempo oficial, los hermanos Sarabia recordaron que se les reventó el radiador y fueron auxiliados en la laguna de San Ignacio por un poblador de esa zona.

El “Zurdo” Sarabia y “Tiqui” Sarabia dividieron la manejada en esa ocasión, señalando el segundo que eran otras épocas en relación a las actuales, con vehículos muy stocks y también sin contar con un GPS.

Los Sarabia fueron también pioneros del Motocross en Ensenada, llevando a cabo esa clase de eventos tras visitar a un club de Long Beach, California.

El origen del nombre de esta escudería tiene que ver con el Espíritu de San Luis, hazaña en la que estuvo involucrada el piloto estadounidense Charles Lindbergh, quien cruzó el Atlántico en un aeroplano, de Nueva York a París.

Será interesante ver si la familia Sarabia tiene listo su nuevo Clase 11 para la edición 51 de la Baja 1000 para rendirle un merecido homenaje a “El Zurdo” de la mano de una victoria en “La madre de todas las carreras fuera de camino”, descanse en paz.

Fotos: Gabriel García y Cortesía