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Nuevo visitante de Ensenada

El Murciélago Mexicano de Cola Libre es una especie que desde hace unos 15 años hizo su aparición en la ciudad, es un mamífero que es polinizador y consume gran cantidad de insectos nocivos para la agricultura
jueves, 20 de diciembre de 2018 · 00:00

Arnulfo Estrada Ramírez*/COLABORACIÓN
Ensenada, B. C.

Como parte de la crónica natural de Ensenada, se describe al murciélago mexicano de cola libre, cuyo nombre científico es Tadarida brasiliensis mexicana.

Esta especie fue identificada en Ensenada hace aproximadamente 15 años y desde entonces su población ha ido aumentando. Por supuesto, que es una buena noticia debido a que es considerada como una especie que consume gran cantidad de insectos nocivos para la agricultura, por tal motivo, lo considero como un distinguido visitante temporal que forma parte de la fauna útil que utiliza las construcciones urbanas para reproducirse.

Desde hace cinco años, le he dado seguimiento diario a una pequeña colonia de murciélagos que se asentaron en los techos de una vivienda de tres niveles vecina a mi domicilio. Los techos del tercer nivel, tienen alrededor de nueve años de haberse terminado, pero no se tiene la fecha exacta en que empezaron a usarse como zona de anidación de murciélagos. Lo que sí sabemos con certeza, es que desde el principio de la construcción, gorriones y estorninos construyeron los nidos en donde ahora comparten y se disputan con los murciélagos. Por cierto, el estornino es un ave en franco crecimiento en Ensenada y contraria al murciélago, debido a que es una especie muy nociva para la agricultura. Esta será descrita con mayor detalle en próxima reseña.

ASPECTOS GENERALES
El murciélago mexicano de cola libre, es conocido así debido a que la cola vertebral se extiende más allá de la membrana interfemoral que es corta y no-escotada. Son murciélagos pequeños a medianos, la coloración en general es pardo con la base del pelo blanquecina, más claro el dorso que el vientre. Sus hocicos son pequeños y anchos y tienen labios carnosos con diversos dobleces.

El labio superior presenta surcos y pliegues verticales. Tienen alas largas y estrechas que les permiten vuelos muy rápidos pero poco maniobrables.

Las patas son cortas y poseen vellos sensitivos en el borde externo de los dedos primero y quinto al igual que en el hocico, orejas amplias, cortas y anchas, proyectadas hacia los lados (no hacia al frente como las demás familias).

Son componentes importantes de la fauna Tropical y Subtropical y se distribuyen desde el centro de EU hasta el sur de Argentina. Son insectívoros y capturan su presa al vuelo. Son muy sociales y forman colonias desde individuos solitarios hasta grandes grupos de millones, principalmente en cuevas. Las colonias son consideradas como las más grandes entre los quirópteros.

Son murciélagos con una longitud total promedio de 94 milímetros y peso promedio es de 12 gramos. Las orejas no están unidas en la línea media. El murciélago de cola libre migra de Texas a México a finales de febrero, tras establecerse hembras y machos se dividen en sitios separados.

Los machos alcanzan su edad reproductiva a los dos años, mientras las hembras en el primer año. Tras la copula, las crías nacen aproximadamente en 90 días (junio) y solo paren una sola por hembra y no todas las hembras se reproducen todos los años. El tiempo de destete es a la sexta semana, donde la cría ya puede emprender el vuelo. Durante esas seis semanas las hembras salen a alimentarse dejando a la cría perchada y regresan a alimentarlas al menos una vez antes del amanecer. Son considerados como los más rápidos entre los murciélagos, calculando el vuelo en 97 kilómetros por hora y en alturas por encima de cualquier otro mamífero o ave.

LOS PRIMEROS ESTUDIOS
Los primeros estudios del murciélago mexicano de cola libre que se hicieron en Ensenada, fueron reportados por Briones Escobedo, N. y R. Martínez Gallardo, investigadores de la Facultad de Ciencias de la Universidad Autónoma de Baja California, y por J. O. Whitaer, del Laboratorio de Manejo y Conservación de Vida Silvestre de Indiana State University de los Estados Unidos.

El estudio se centró en los hábitos alimenticios de una colonia urbana de murciélagos en Ensenada, utilizando 12 muestras fecales. Los resultados fueron presentados en el 2005 en el XVIII Congreso Nacional de Zoología llevado a cabo en Monterrey, Nuevo León. Del análisis se obtuvo que en las 12 muestras fecales se encontraron 20 artículos alimenticios distintos, dentro de los cuales fueron predominantes residuos de los siguientes grupos de insectos en decreciente orden de importancia: Lepidoptera, Chironomidae, Coleoptera No Identificados, Acari y Scarabaeidae. Los artículos más frecuentemente encontrados en las muestras correspondieron a Lepidoptera, Coleoptera, Organos Internos, Chironomidae, Acari, Cicadellidae y Huevecillos.

Los resultados sugieren que es posible que Tadarida brasilinsis mexicana contribuya en la regulación de las poblaciones de estos insectos que pueden representar plagas en los campos agrícolas circundantes a las áreas urbanas de Ensenada.

NUEVA COLONIA
Una nueva colonia de murciélagos mexicanos de cola libre, se comenzó a formar hace aproximadamente nueve años en los techos de la vivienda vecina a mi domicilio, sin embargo, hasta hace cinco años comencé a registrar datos diarios que incluyen la fecha en que llegan, número de individuos, comportamiento reproductivo, días que permanecen en sus madrigueras y los días que emigran a otros lugares, entre otros datos. La identificación plena de la especie, se hizo a partir de un ejemplar que cayó de su nido el 29 de marzo de 2016. Las fotografías del mismo, son las que ilustran este artículo. Los resultados más relevantes se describen a continuación.

El 1 de junio de 2014 se comenzó a tomar datos diarios del murciélago cuando éste abandona sus nidos al caer la tarde, aproximadamente 15 minutos después del ocaso del sol. No se registró la fecha de llegada a sus nidos, debido a que corresponde a los meses entre febrero y abril.

Durante los meses de junio y agosto, se observó gran actividad reproductiva, principalmente en lo que respecta al cuidado de las crías que permanecieron en sus nidos y que se les alimentaban en los horarios cercanos a la media noche. El número máximo de individuos registrados en ese año, fue de 25 murciélagos en los meses de julio y agosto. El 12 de noviembre emigraron a otros lugares los últimos cuatro ejemplares.

Entre los años de 2015 y 2018, la población de murciélagos se duplicó, aumentando gradualmente de 36 individuos en 2015; 45 en 2016; 60 en 2017, y 73 en 2018. También se vio el aumento de días permanecidos en sus nidos, siendo de un promedio de 235 días entre los años de 2015 al 2017 y de 300 días en el 2018.

En el 2015 permanecieron en sus madrigueras entre el 9 de abril y el 12 de noviembre (235 días); en el 2016 entre el 29 de febrero y el 7 de octubre (240 días); en el 2017 llegaron el 7 de abril y se retiraron el 22 de noviembre (230 días), y este año de 2018, llegaron el 2 de febrero y se fueron el 28 de noviembre, siendo el año en que hubo más murciélagos y en el que permanecieron en sus madrigueras por más tiempo, con un total de 300 ejemplares. El abandono de sus nidos está relacionada con la víspera de las primeras lluvias de invierno en Ensenada.

La temporada reproductiva es al inicio de la primavera y coincide con la de los gorriones ingleses y los estorninos, con quienes los murciélagos disputan los mismos espacios. En algunas ocasiones se ha visto pelear a murciélagos y estorninos, sobre todo en los días que los estorninos se quedan a cuidar a sus crías por las noches.

COMENTARIO
Históricamente, al murciélago se le ha satanizado y en más de una ocasión se le ha combatido y destruido en grandes cuevas que albergan hasta algunos millones de ejemplares. Sin embargo, ahora sabemos que nos brindan grandes beneficios en el combate de plagas nocivas y son también grandes polinizadores de plantas, como es el caso de las especies que se alimentan de néctar. Cuidemos de ellos.

Sabemos que en Ensenada habitan los techos de grandes construcciones como las del Riviera y El Montemar, que bajo sus tejas anidan importantes colonias de murciélagos.

*Cronista de Ensenada
arnulfoestrada54@gmail.com

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