Requiere de estudios “Tramo de la Muerte”

Gerardo Sánchez/EL VIGÍA
gsanchez@elvigia.net | Ensenada, B. C.

La ampliación del tramo carretero Chapultepec-Maneadero requiere obligatoriamente de un estudio de impacto ambiental para poderse aplicar, afirmó el delegado de la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales, Alfonso Blancafort Camarena.

Todas las obras carreteras, puntualizó requieren de la presentación y autorización correspondiente y no puede haber excepciones, señaló el funcionario federal.

En días pasados el Consejo Coordinador Empresarial de Ensenada (CCEE) anunció contar con recursos para realizar el estudio técnico y de costo-beneficio de la ampliación de ese tramo vial y poder presentarlos ante la Secretaría de Hacienda para buscar su autorización en el ejercicio federal de este año.

Sin embargo, señalaron los empresarios, se desconocía si se requería realizar estudios de impacto ambiental y quién los realizaría o costearía.

Por otra parte el delegado de la Semarnat indicó que las plantas desalinizadoras que la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) clausuró la semana pasada permanecerán sin operar hasta que no presenten su respectivo estudio de impacto ambiental, con el cual no contaban.

Plantas desaladoras
Aseguró que se está en pláticas con los productores agrícolas de San Quintín y Maneadero que ya han instalado o que están por instalar dichas plantas, para explicarles cuales son los requerimientos para el manejo de sus aguas de desecho que se generan en la desalinización, residuos que de no procesarse adecuadamente tendrían un impacto negativo ambiental.

Aclaró que la mayoría de esas plantas desalinizadoras tratan aguas salobres de los pozos de las regiones antes mencionadas y que no se trata del procesamiento de aguas oceánicas.

En el caso de la planta desalinizadora de agua de mar que promueve el Gobierno del Estado ya cuenta con los estudios ambientales y se le ha solicitado ampliar la información sobre algunos detalles de su operatividad.