Desvían arroyo en El Sauzal

Nicté Madrigal/EL VIGÍA
nmadrigal@elvigia.net | Ensenada, B. C.

Vecinos de Colinas del Mar, Colinas del Sauzal y Cuatro Milpas, alertaron sobre riesgos de inundaciones y deslaves, debido al manejo inadecuado del arroyo Cuatro Milpas por parte de las constructoras Vehcsa y el nuevo fraccionamiento “Gaia Residencial” (antes Casas GEO).

Refirieron que hace más de un año solicitaron, por la vía legal la información, licencias, permisos y factibilidades de las construcciones, sin embargo, a la fecha no han tenido respuesta.

Ante la situación, urgieron la actuación de las autoridades correspondientes, como la Comisión Nacional del Agua (Conagua), Protección Civil y Dirección de Administración Urbana, Ecología y Medio Ambiente.

Sonia Álvarez, vecina de la zona sostuvo que ha constatado en diversas ocasiones el desbordamiento del arroyo.

“Los vecinos del último kilómetro hemos observado en los últimos años el desborde del arroyo cuando han ocurrido lluvias intensas o prolongadas, con la consecuente inundación en los fraccionamientos de ambos lados del arroyo Cuatro Milpas”, agregó Álvarez Villavicencio.

Los afectados potenciales solicitan que se lleven a cabo estudios técnicos que integren los factores geológicos, hidrológicos, geotécnicos y sociales, porque, no obstante la desatención a las solicitudes anteriores, las obras continúan avanzando en las márgenes del arroyo.

“Algunas de ellas sin los permisos correspondientes y con varios intereses contrapuestos”, enfatizaron.

Observaron que “el arroyo Cuatro Milpas drena una cuenca hidrológica de más de 19 kilómetros cuadrados desde la costa e incluye el arroyo del Libramiento Ensenada”.

Se estima, con base en información del Inegi, que la longitud máxima del cauce principal de Cuatro Milpas es de 10 kilómetros, de acuerdo con datos del geólogo, Luis Delgado.

Desagüe al mar
Sólo el primer kilómetro, desde la costa hasta el nuevo desarrollo habitacional “Gaia” cuenta con calles pavimentadas y, en ese mismo kilómetro, el arroyo, que no rebasa los 15 metros de ancho, capta el volumen drenado desde 5 kilómetros, aguas arriba.

Su cauce fue desviado peligrosamente 20 metros antes de llegar a la carretera de cuota Tijuana-Ensenada (Escénica), la cual, es la única salida de la ciudad hacia el norte.

Su desagüe al mar se ha entubado decenas de metros y pasa por debajo de la carretera y de un asentamiento irregular entre Colinas de Montebello y Colinas de Downey.

Expusieron que la cuenca asociada con el arroyo Cuatro Milpas es parte de una unidad geológica que aflora a lo largo del tramo Salsipuedes de la carretera Escénica, bien conocida por su inestabilidad y la facilidad con la que se desintegran sus paredes de arcillas, arenas y conglomerados, principalmente.

Cabe recordar que la zona califica como de riesgo por inundación.

Desborde de arroyo
En el periodo de lluvias 2017-2018, personal de la delegación El Sauzal atestiguó la forma en que el arroyo socava su margen sur llegando hasta la única vialidad que comunica al interior de la cuenca de Cuatro Milpas y los desarrollos Gaia y las tres secciones construidas por Vehcsa (Colinas del Mar Residencial y Colinas del Sauzal).

Esta vialidad colinda con las instalaciones de la Comisión Estatal de Servicios Públicos de Ensenada (Cespe), y atraviesa los ductos de Petróleos Mexicanos (Pemex), ubicados a 400 metros de la carretera.

Es muy importante tomar en cuenta que, aunque con el cambio climático se pronostica una disminución en la precipitación, por lo que es probable que continuará la sequía en esta zona, es decir, menor volumen de agua captada en la temporada de lluvias

Ahora que la urbanización ha dejado tan pocos espacios abiertos, principalmente en la margen sur del arroyo Cuatro Milpas, la pavimentación que recubrirá cada vez más la zona de Colinas del Mar y Colinas del Sauzal disminuirá la filtración del agua de las lluvias y el flujo de agua del arroyo aumentará y, con ello, el riesgo por inundación.

A este respecto, el pasado 3 de agosto la Fundación Aportemos A.C. presentó una denuncia ante Conagua por las obras que se están realizando con maquinaria pesada a orillas del arroyo, que pretenden aplanar y rellenar.

Presuntamente para la construcción de un centro comercial, en una zona federal previamente concesionada a la asociación civil, para fines de conservación.

“Estos rellenos irregulares disminuyen aún más la zona del afluente y aumentan el riesgo por inundación,” dijo Sabetty Hernández de la Fundación Aportemos.