Tiempo de adviento es para reflexionar

KARLA PADILLA/EL VIGÍA
kpadilla@elvigia.net | Ensenada, B. C.

“El adviento es un tiempo que invita a prepararse para la llegada de Jesús, que permite analizar y vigilar los distintos aspectos de nuestra vida y comportamiento en los que estamos adormilados e indiferentes”, señaló Rafael Valdez Torres, obispo de la Diócesis de Ensenada.

Indicó que en ocasiones, el ser humano se “adormila” y deja de tomar conciencia de su identidad como hijo de Dios, de sus responsabilidades en la vida familiar, de las posibilidades de practicar la caridad con las obras de misericordia y se acostumbra a un estilo de vida cómodo.

Durante este periodo de adviento, dijo, la invitación es a hacer un examen de conciencia de las cosas que se han dejado de hacer, las que se deben corregir, las oportunidades desaprovechadas para crecer espiritualmente y por qué nos hemos alejado de Dios.

“Pensemos en esto, qué debo hacer yo y por qué lo he dejado de hacer, qué he permitido que en mi familia se pierda y por lo tanto vayamos caminando en sentido contrario y no hacia el crecimiento, hacia la integridad y hacia la felicidad”, destacó.

Estar atentos
Valdez Torres explicó que velar y estar atentos significa poner atención en aquello que el Señor recomienda, porque la vida es un don de Dios que, si se descuida, se puede perder.

“Podemos preguntarnos, ¿he velado por mi propia felicidad o me he distraído en mis placeres, en mis intereses temporales, en mi conveniencia, en mi falsa felicidad?; ¿he velado por el bien, por la justicia, por la paz, por la tranquilidad, me he preocupado por enseñar que Dios es bueno o sencillamente me he dejado llevar por una indiferencia ante la presencia de Dios en nuestra vida?”, dijo.

La felicidad es el objetivo de la vida, sin embargo, se debe estar vigilantes hacia dónde vamos y hacia dónde queremos llegar, para que los obstáculos de la vida no impidan llegar a la meta establecida al momento de entregarle cuentas de nuestra vida a Dios, concluyó.