Los vecinos ruidosos y clases en el hogar

Gerardo Sánchez/EL VIGÍA
gsanchez@elvigia.net | Ensenada, B. C.

Los vecinos ruidosos se han convertido en un grave problema de escolares y maestros en esta nueva realidad educativa digital.
Los altos volúmenes de la música, los gritos y otros ruidos estridentes son elementos que distraen e interrumpen el aprendizaje, por lo que tiene que promoverse una nueva cultura vecinal en la cual se busque respetar los niveles de los sonidos que se generan.
Las profesoras Patricia Mozo y Rosa María Sorrey, hablaron sobre este tema que aunque cotidiano y que lo padecen miles de padres de familia, escolares y maestros poco se ha difundido y sobre atendido.
No podemos -dijeron- tratar de imponer un silencio total cuando se imparten las clases e interrumpir la cotidianidad de los demás, pero si dar a conocer que estos ruidos están afectando la educación de los menores.
Ambas docentes indicaron que este problema es mucho más grave en las viviendas multifamiliares, en donde las casas son pequeñas y están una al lado de otra y los sonidos se comparten.
La maestra Rosa María, quien imparte clases a niños de primer grado, señala que estos ruidos distraen fácilmente a los pequeños, situación que dice se agravó cuando uno de sus vecinos “estrenó” sus bocinas.

Ser empáticos
Patricia Mozo pidió a la comunidad tomar conciencia de este tema y ser empáticos y comprensivos y tratar de reducir los altos volúmenes, que a diferencia de lo que ocurría antes de la pandemia, no sólo se trata de un tema de que se moleste a los demás, en este caso también se está afectando el proceso educativo.
El aprendizaje a través de las tecnologías digitales ya es complejo, pero hacerlo todavía con una condición ruidosa y viciada del exterior pues dificulta más este proceso, concluyeron ambas docentes.